Hallan restos arqueológicos compatibles con la puerta medieval y el antiguo puerto de Ferrol Vello

El subsuelo de la calle San Francisco guarda restos arqueológicos que son compatibles con la puerta medieval de la muralla, una construcción que figura en algunos planos históricos de Ferrol Vello a la altura de la calle del Cristo. También con la cuesta de un antiguo muelle por la que se bajaba al mar en la zona donde hoy si sitúa la plaza Vella.

Así lo ha podido comprobar este fin de semana el alcalde, Ángel Mato, y el concejal de Urbanismo que fueron informados «in situ» por técnicos municipales. Aunque estos últimos no descartan que de pueda tratar de otro tipo de estructuras, entienden que hay muchos indicios que apuntan en esa dirección, ya que encaja a la perfección con el que recoge diferente documentación del siglo XVIII.

La aparición de varios muros, en parte formados por perpiaños de granito, ha obligado en los últimos días a variar los trabajos en San Francisco para comprobar de que se trataba. Revisada la zona por la arqueóloga del Ayuntamiento y el arquitecto responsable de la obra de reurbanización de la calle, se comprobó la conveniencia de estudiar los restos con mayor detenimiento.

“De confirmarse que se trata de unas construcciones tan relevantes en el pasado de Ferrol, el Ayuntamiento, desde luego, apostará por conservarlas de manera que puedan convertirse en un atractivo patrimonial y también turístico para el barrio y para la ciudad”, aseguró el alcalde durante la visita.

Mato expresó que, aunque este tipo de descubrimientos hay que tomarlos “con cierta cautela”, es necesario analizar “con todo el rigor” la posibilidad de que se trate de la puerta y del muelle, “ya que los expertos creen que hay indicios más que suficientes para trabajar sobre esa hipótesis”.

El primer paso, según explicó, será comunicarle oficialmente esta incidencia a la Dirección General de Patrimonio Cultural, de la Xunta de Galicia.

En el informe que se le va a remitir se incluirán los datos de todo lo encontrado hasta el momento y una propuesta para ampliar la excavación con métodos arqueológicos.

El concejal ha explicado que, en caso necesario, se variaría en el proyecto la canalización de saneamiento con el fin de no afectar a ese patrimonio arqueológico.

Una posibilidad, detalló, sería conducirla a través de la plaza Vella hasta el colector de la calle del Rastro.

“Hay dos maneras de tratar el patrimonio. Cuando uno hace un descubrimiento de este tipo, puede intentar evitar que tenga incidencia sobre la obra renunciando a su historia o puede ver una oportunidad para el barrio y compartirlo con los vecinos”, comentó el edil de urbanismo.

“Lo que quisimos, antes de aventurarnos, fue saber si los restos podían tener interés. Ahora que todo apunta a que esa posibilidad es muy alta, tenemos claro que merece la pena estudiarlos en profundidad, y así se lo vamos a solicitar a la Dirección General de Patrimonio”, concluyó.