La entereza de la propietaria del estanco , expendeduría nº 2, de la carretera de Castilla, número 24 esquina con la calle Pontevedra, junto con el apoyo de su esposo hizo que un joven que cuchillo en mano intentaba apoderarse del dinero de la caja saliese huyendo sin poder llevar a cabo su fin.
Todo comenzó cuando un joven, con un arma blanca en la mano entró en el estanco y le dijo a la propietaria, que estaba detrás del mostrador, que le entregase el dinero que había en la caja.
Con lo que no contaba fue que la mujer le dijo que había apretado el botón de alarma policial y además con que el marido que se encontraba en la parte trasera del local apareciese portando la barra de bajar la persiana metálica.
Sin pensarlo ni un minuto el atracador huyó mientras de inmediato se presentaron en la zona efectivos de las policías nacional y local quienes procedieron a la búsqueda del presunto delincuente
La pandemia ha traído esta situación de crisis a todo el mundo, la gente está desesperada por tener dinero y ya no saben como. Nuestro futuro no se ve bien a corto plazo…