El equipo de atestados del destacamento de Tráfico de la Guardia Civil de Ferrol después de una intensa investigación, localizó a un conductor que colisionó con un Alfa Romeo contra una vivienda, tras una salida de vía, en San Julián, en Narón, y posteriormente se ausentó del lugar del siniestro, supuestamente para eludir ser controlado por las Fuerzas de Seguridad. El inmueble sufrió daños de consideración.
La investigación se inició el pasado 7 de junio, cuando testigos presenciales de la salida de vía de un vehículo llamaron al CIAE-112 para alertar del suceso.
En la llamada se comunicaba que en la carretera DP-5401, que une Xuvia con Castro, por la parroquia de San Julian, en Narón, un turismo había impactado contra un muro de piedra y que se habían bajado del turismo accidentado dos personas, un varón y una mujer, y que se habían ido del lugar.
Al punto de la colisión llegaron efectivos de la Guardia Civil de Tráfico, a las 08,30 horas, para realizar la primera inspección ocular y verificar lo denunciado por el alertante, la huida del lugar del conductor causante del siniestro, pasando aviso al equipo de atestados.
Comenzó la investigación, primero en el lugar del siniestro, realizando una reconstrucción de la salida de vía coincidiendo con un tramo de vía recta después de una curva hacia la derecha, el conductor del turismo debido a la velocidad a la que circulaba perdió el control del vehículo atravesando el carril contrario de circulación, saliéndose de la vía por su margen izquierdo, en las proximidades de un paso de peatones y una parada de autobús dejando una frenada de 57 metros de largo, en pendiente ascendente, hasta que regresó al carril derecho volviéndose de nuevo a salir de la vía por el margen derecho chocando contra un muro de piedra y derrumbando dos metros del mismo. Ello sumando a que la velocidad máxima del tramo donde ocurrió el siniestro es de 50 km/h., el mal estado de los neumáticos del vehículo y que la Inspección Técnica del Turismo figuraba caducada desde el año 2019, hizo que los instructores concluyeran que la causa del siniestro vial fuese una conducción temeraria.
Tras varias horas de investigación, se analizó el interior del vehículo, se recogieron manifestaciones de los testigos, y consultas en las bases de datos de la Dirección General de Tráfico y de la Guardia Civil, manifestaciones del titular del vehículo y otras gestiones realizadas, sobre las 14,45 horas del mismo día, localizan al conductor causante del siniestro, el cual, ante las pruebas que apuntaban hacia él, no pudo hacer otra cosa que reconocer los hechos. Al someterlo a las pruebas de detección alcohólica arrojó resultado positivo, 0,46 y 0,45 miligramos de alcohol en litro de aire espirado.