Nunca está de más analizar cómo hemos votado los ferrolanos, para saber saber más de nosotros mismos, y compararnos con el resto de los españoles. Estos son los resultados de las recientes elecciones legislativas en nuestra ciudad, comparados con las celebradas en abril
A la vista de estos datos, podemos decir que el comportamiento de los ferrolanos ha sido similar al de los demás españoles, tal vez con algunos matices importantes.
El primero es que Ferrol sigue siendo una ciudad de izquierdas, desde luego bastante más que la media española. Los socialistas locales han resistido por encima de la media provincial, pese a que en esta campaña se han introducido conflicto industriales que aparentemente tenían que haberles provocado una fuga de voto suplementaria.
El segundo es que pese a esa idea repetida una y otra vez, de que “los de derechas siempre votan y los de izquierdas se abstienen más”, en estas elecciones hemos podido comprobar una vez más, que tanto en Ferrol como en España, los dos bloques se abstienen en similar medida.
En tercer lugar, el crecimiento de Vox en Galicia y Ferrol ha sido notablemente menor que en el resto del estado, lo que puede ser más mérito del PP gallego que demérito de la ultra-derecha. Reconozco que lo de Ferrol me sorprende especialmente, porque somos una ciudad con una importante presencia militar, y en estas elecciones la influencia de los acontecimientos catalanes ha sido casi determinante, y los militares viven con más intensidad o visceralidad los desafíos a la integridad territorial. Estaba convencido de que en Ferrol, Vox tendría un mayor número de votos.
En cuarto lugar, es curioso que el BNG obtenga en nuestra ciudad casi tres puntos menos que la media provincial, lo que tendría que llevarles a hacer alguna que otra reflexión sobre sus pautas de comportamiento.
Finalmente, en septiembre del año entrante celebraremos elecciones autonómicas. En 2016, la derecha superó en 100.000 votos a la izquierda, mientras que en estas elecciones la izquierda ha vuelto a superar a la derecha en aproximadamente 150.000 votos. No es previsible que en unos meses haya cambios significativos en la intención de los votantes, y si finalmente Pedro Sanchez-Castejón logra ser investido presidente de un gobierno de coalición, y este funciona razonablemente bien a lo largo de 2020, Alberto Núñez Feijoo no podrá esgrimir a su favor el fantasma del gobierno bipartito de Emilio Pérez Touriño y Anxo Quintana, con lo que el nuevo presidente de la Xunta será con toda seguridad el socialista Gonzalo Caballero.
Enrique, con tu experiencia deberías de saber que el comportamiento de los electores de Ferrol resulta especialmente dispar en las elecciones autonómicas que en el resto, aunque entiendo que manifiestes un deseo más que una opinión.
Con cordialidad.