Miembros de la corporación ferrolana se dieron cita este mediodía delante de las puertas del Concello para guardar un minuto de silencio junto con trabajadores de la administración y vecinos, como signo de repulsa por el asesinato de una mujer de 46 años en el Port de Pollença, Mallorca, en manos de su marido.
De esta forma, tal y como recordó la concejala de Muller, Beatriz Sestayo, desde el Concello de Ferrol se seguirán realizando este tipo de actos de repulsa por la violencia de género al día siguiente de que ocurra un nuevo crimen, con la esperanza de que sea la última vez que se tenga que celebrar.