La semana pasada los ladrones se llevaron productos de una carnicería situada en la calle Cruceiro y en ésta actuaron en la Avenida Marqués de Figueroa entrando en una tienda de congelados.
Los ladrones entraron en el establecimiento quitando el bombín de la puerta trasera, una vez dentro, fueron directamente a la caja registradora y también entraron en la oficina donde provocaron algunos daños.
Entre lo sustraído y los daños causados, la jefa de la tienda calcula unas pérdidas de unos 2.500 euros
El robo fue cometido entre las 14:00h del pasado viernes cuando se cerró la tienda de congelados y las 9:30h de ayer lunes cuando se abrió el establecimiento.