Crónicas de un pleno naronés. Los últimos presupuestos

(De nuestro corresponsal J.S.)

Al hablar de política municipal, hay varios debates que están marcados en el calendario. Y el de los presupuestos el que más.

Pues bien, ese debate tuvo lugar en el pleno celebrado el pasado jueves, día 27. Lo que pasa que decepcionó un poco, sacando contadas excepciones.

EL TEMA PRESUPUESTARIO

Recordemos que en Narón gobiernan 4 partidos. A pesar de que hay un concejal de hacienda y de las cuentas públicas, lo normal sería que hubiesen intervenido todos los portavoces de los diferentes grupos, y que hubiesen explicado, al menos en lo referido a sus áreas, en que consistía el presupuesto. Eso no sucedió.

Pero vayamos por partes. En primer lugar, solo intervino por parte del gobierno, al menos en primera instancia, el concejal de gestión presupuestaria Pablo Villamar. Digo en primera instancia porque, tras el debate con el único grupo de la oposición, el Partido Popular, tuvo que intervenir el alcalde de Narón para intentar lavarle la cara un poco a su edil.

La intervención del edil nacionalista sonó poco creíble, con voz casi temblorosa, y hablando solo de datos de carácter genérico, sin haber aportado nada en concreto. Es más, repasando los datos de la intervención del año pasado y del otro más, fue casi la misma. Lamentable.

La única duda es si su pobre intervención fue debida a que no la preparó, o a que desde la grada del salón de plenos estaban protestando unas 100 personas del club Narón Balompé Piñeiros, ante el injusto reparto de las ayudas deportivas reflejado en el documento del presupuesto para el próximo año. Pero luego entraremos en eso.

Una vez hubo intervenido el edil responsable de las cuentas, tomó la palabra el portavoz de los populares, Miguel de Santiago. Desde la formación conservadora ya habían anunciado su postura en los días anteriores, votarían que no, como se informó desde Galicia Ártabra y ya habían trazado las líneas generales de su posición enfrentada al gobierno cuatripartito. Para ellos, todo se resumía en “más impuestos y más gastos internos, menos servicios y menos inversiones”.

De Santiago fue desgranando paso por paso y ofreciendo una amplía batería de datos, los motivos que les llevaban a mantener su postura negativa. Algo que no hicieron desde el grupo de gobierno y que fue lo que muchos de los asistentes a la sesión plenaria desde las gradas echamos de menos.

Así, de Santiago le reprochó al grupo de gobierno que solo destinasen a gasto social el 16,16%, y a inversiones un ínfimo 1,65%. Por establecer una comparativa que hacemos desde este medio, en Ferrol invierten casi el 10% del presupuesto. El popular ofreció una serie de comparativas, e incidió en criticar que se gastase más en dedicaciones exclusivas que en muchas partidas de gasto social, tales como “igualdad”, o “promoción social”, o en otras como “juventud” o “turismo”.

 ATAQUES PERSONALES AL LIDER POPULAR

Viendo la desigualdad en el debate donde, y tras haber perdido claramente los papeles, el  nacionalista Pablo Villamar llegó a reprochar a líder popular asuntos de su vida personaL, tuvo que intervenir el alcalde para explicar un poco la postura del gobierno de Narón, viendo que su concejal de hacienda lo estaba dejando quedar en mal lugar. Cabe destacar que no es la primera vez en los últimos meses que José Manuel Blanco, alcalde de Narón, tiene que contradecir y desautorizar a su edil de asuntos económicos, o echar un capote para sacarle las castañas del fuego.

Por último, para cerrar el capítulo de los presupuestos, una vez más ha quedado patente que los populares tienen las más ideas claras en ese sentido, y que precisamente este es uno de los puntos más débiles del cuatripartito. No en vano mucha gente nos escribe, o nos comenta, para preguntar cómo es posible que tras haber subido los impuestos 4 años seguidos, cómo es posible que no se hagan inversiones y que la situación económica no sea la ideal. Nosotros no podemos contestarles… tal vez desde el gobierno de Narón consigan hacerlo.

LA PROTESTA DEL CLUB NARÓN BALOMPÉ

Antes de nada, hay que reconocer que sí acudieron al pleno como habían señalado en una entrevista en Galicia Ártabra, que sí protestaron, pero que lo hicieron de manera pacífica y ejemplar. Llegado al punto de los presupuestos, lanzaron algunos reproches, entonaron un par de cánticos a favor del club, y salieron del pleno sin molestar más.

La protesta del club, como ya hemos visto en días pasados, radica en el recorte en las ayudas que recibirán en el año próximo.

Este fue un asunto que emergió en varios debates en el pleno, siempre a instancias de los populares, y que llegó hasta el apartado de ruegos y preguntas.

Los populares, al igual que los miembros del club, les reprocharon que cómo era posible pasar de recibir 43.000 euros a 18.000 euros manteniendo el mismo número de fichas. Cabe señalar que otros clubs, como el Val, reciben alrededor de 40.000 euros, que es lo mismo que pedían desde el Narón Balompé.

El debate lo zanjó el alcalde con su última intervención del pleno, afirmando que había motivos para la rebaja del convenio,  y que, en cualquier caso, dependía de su criterio político, al igual que el resto de convenios del prespuesto.

Salientable también, en ese mismo sentido, una intervención del edil popular Marcos López, que le reprochó al nacionalista Pablo Villamar que cuando estaba éste último en la oposición siempre decía estar en contra de la concesión de convenios o subvenciones nominativas, y que en los presupuestos actuales el mismo Villamar propusiera una gran cantidad de ellos.

Como dato, reflejar que en los presupuestos de Narón hay transferencias nominativas por valor de más de 2,2 millones de euros, repartidos en 75 convenios, incluyendo la aportación al Padroado de Cultura por valor de 1,3 millones. Como contestación, Pablo Villamar solo fue capaz de lanzar desde su asiento y sin tener la palabra, descalificaciones varias que no vamos a recoger aquí.

 OTROS ASUNTOS

En el pleno también se trató la moción del grupo de gobierno para pedir a la Xunta o al Estado una serie de actuaciones.

En esa moción, los populares les reprocharon a los miembros del cuatripartito que la mayoría eran competencias municipales, y que para cumplirlas o negociar con otras administraciones no necesitaban presentaban moción alguna, ya que son el grupo de gobierno.

De entre las obras que se pedían estaba incluida la obra del saneamiento de la ría del tramo Cadaval-Xuvia. Sobre esto, el edil popular Marcos López le recordó al grupo de gobierno que el saneamiento es una competencia municipal, que entre el Estado y la Xunta ya ponen 6 millones de euros, y que los populares no entienden porqué se va a dejar a esas parroquias sin sanear, cuando desde el ayuntamiento solo tienen que poner 1,4 millones de euros repartidos en 45 años. Para establecer una comparativa, el popular le recordó a Blanco que en esos mismos 45 años el mantenimiento del Pazo de la Cultura habrá acumulado 27 millones de euros, o que solo con las dedicaciones exclusivas de esta legislatura ya hubiesen podido atender la obra.

Por su parte el alcalde de Narón explicó que todos los años y por estas fechas se suele pedir con una moción una serie de actuaciones a otras administraciones, y reclamó el derecho de Narón a que otras administraciones inviertan. Algo que también suscitó un agrio debate, toda vez que el popular le recordó que las demás administraciones son las únicas que hacen inversiones en Narón, con obras como la carretera y el saneamiento de Sedes, la ampliación y mejora de la carretera de San Xiao, por parte de la Diputación, o las obras en el colegio Ponte de Xuvia, por parte de la Xunta de Galicia, entre otras.

En la misma sesión plenaria también hubo otros puntos de interés, como una moción sobre las bibliotecas que defendió el socialista Mario Isasi, que encontró contestación en la edil popular Patricia Aneiros, quien demostró también tener mucho más claro el tema. También hubo una moción del grupo mixto sobre los afectados del amianto.

Para finalizar llegó el turno de ruegos y preguntas, donde el popular Pablo Prieto preguntó por las deficiencias del campo del Cadaval, que también era una de las cuestiones que reclamaban desde el Narón Balompé, o por el reparto de las ayudas al deporte.

A este respecto, el alcalde contestó, como ya habíamos dicho antes, que las ayudas se concedían según su propio criterio político, y que no había tenido conocimiento de deficiencias en ese campo hasta que desde el club lanzaron los reproches. Algo que tampoco entendieron muy bien desde el club, desde donde un directivo se cuestionaba “cómo no van a saber de las deficiencias si el campo es municipal. No debería hacer falta decirles que el campo se inunda, o que las porterías están rotas…. Ya deberían saberlo ellos. Eso es que no lo revisan y no cumplen con su deber”.

Y eso fue todo. Para el mes, más.