La jueza instructora de la Operación Pokémon, Pilar de Lara, ha denegado la solicitud de la defensa del alcalde de Ferrol, José Manuel Rey Varela, para que declarasen como testigos los agentes de Vigilancia Aduanera que lo identificaron a él como interlocutor en conversaciones telefónicas en las que se evidencia el pago de un soborno por parte de Vendex, puesto que ya se va a realizar una prueba pericial fonométrica que «será la única que excluya o reafirme» la participación del regidor en los hechos.
En unas conversaciones telefónicas grabadas el 30 de mayo y el 2 de junio de 2011, al responsable de Vendex en Galicia, José María Tutor, se hace alusión a una supuesta entrega de 3.000 euros y su interlocutor, al que se refiere como ‘Josman’, fue identificado por Vigilancia Aduanera como José Manuel Rey Varela. No obstante, el regidor de Ferrol negó ser ‘Josman’ y señaló a otro miembro del PP de Ferrol.
Por ello, la jueza instructora ordenó practicar una prueba fonométrica «al día siguiente» de que el regidor ferrolano negase en su comparecencia en los juzgados que fuese su voz. Así, Pilar de Lara reivindica en un nuevo auto, que no puede exigírsele «mayor inmediatez» y que es «sensible con el derecho de presunción de inocencia», por lo que ordenó la práctica de esta prueba «de oficio», y sin que la defensa de Rey Varela lo hubiera solicitado.
Para la instructora, «carece de sentido» tomar declaración a los agentes para que se limiten a ratificarse en el atestado que elaboraron, en el que ya constan los motivos por los que consideran que el interlocutor es Rey Varela. Además, agrega que para realizar intervenciones telefónicas, no se precisa más que el conocimiento de la dinámica de SITEL y tener «profundas nociones en materia de investigación penal, no requiriéndose conocimientos científicos ni técnicos, ni fonométricos ni acústicos».
TOTAL FIABILIDAD
La jueza indica que la prueba fonométrica es «la única diligencia que puede sacarnos de dudas acerca de la coincidencia o no de las voces» y ve «de todo punto improcedentes por inútiles y superfluas» las diligencias propuestas por la defensa de Rey Varela, que se basaban en la declaración testifical de los dos funcionarios de Vigilancia Aduanera que lo identificaron a él como el interlocutor en la conversación con Tutor.
Para Pilar de Lara, la prueba pericial fonométrica, que practican especialistas en acústica forense, tiene una carácter «eminentemente científico» y cuenta con «total fiabilidad», de forma que «en principio», carece de margen de error. «Las demás diligencias que puedan proponerse resultan irrelevantes al fin perseguido», apunta la jueza.
En cualquier caso, ante la solicitud de la defensa de Rey Varela de que se lleven a cabo las pruebas de forma inmediata, la jueza puntualiza que «las diligencias de instrucción se practicarán compatibilizando la agenda judicial con la carga de trabajo que pesa sobre el órgano judisdiccional, sin que se pueda otorgar preferencia a una determinada diligencia sobre otra, ni a determinados asuntos sobre otros».
Según Rey Varela, su imputación por cohecho se debe a un «grave error de identificación por parte de Vigilancia Aduanera» porque nunca habló por teléfono con José María Tutor, aunque sí reconoció que vio al delegado del Vendex en Galicia en una ocasión, el 26 de octubre del 2011 en su despacho, y después de que el responsable de Vendex se lo pidiese en varias ocasiones.