(JMV-AD) Navantia, perteneciente el Grupo de Participaciones Industriales (SEPI), no pasa por su mejor momento. Según las cuentas publicadas en su web, la compañía ha pasado de unas pérdidas de 43,25 millones de euros en 2011 a 78,27 el año pasado. Esta cifra rompe una tendencia, ya que de 2010 a 2011 sus pérdidas fueron similares -de 46 a 43,2 millones de euros-.
Igualmente, su volumen de negocio en 2012 cayó un 27,47%, de los 1.249,67 millones a 906,41 millones de euros. Navantia también ha visto reducida su cartera de pedidos total en un 25,23% pasando de 2.188,16 millones de euros a 1.636,3 millones.
Por otra parte, el negocio que más ingresos ha reportado ha sido el de fabricación de buques, con 654,23 millones euros. No obstante, esta cantidad es un 28,9% inferior respecto al año anterior.
Por líneas de actividad, la única partida que presenta un resultado favorable en su cartera de pedidos ha sido la de reparaciones y transformación de barcos, que ha triplicado su actividad pasando de 41,23 millones a 129,65 millones de euros.
Entre los contratos que han supuesto más ingresos para la compañía en 2012 figuran, por parte española, el de la última fragata F100, el de los cuatro submarinos S80 y el de los cuatro Buques de Apoyo Marítimo del Ministerio de Defensa español. Con clientes extranjeros, Navantia tiene contratos para la ingeniería de los seis submarinos de la Armada india, para la construcción de los dos buques anfibios (LHD) para Australia -el primero ya fue entregado y el segundo estará listo para finales de año- y el de diseño e ingeniería de tres destructores también para ese mismo país, entre otros.
Las pérdidas de Navantia han motivado que, en un informe del mes de julio del Tribunal de Cuentas, dicho organismo considere «imprescindible» poner en marcha en la compañía una mejor estrategia empresarial, en la que mejore su competitividad con el «necesario control y racionalización de costes».