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El conselleiro de Medio Ambiente, Territorio e Infraestructuras, Agustín Hernández, se comprometió con el alcalde de Fene, Gumersindo Galego, a redactar un proyecto que solucione los problemas de inundaciones del río Cádavo. Esta fue una de las promesas que trasladó el conselleiro al regidor municipal durante una reunión celebrada la mañana del viernes día 1 en la casa consistorial.
Hernández le explicó que Aguas de Galicia realizó una primera evaluación de la situación de ese tramo del río. En función de los resultados de ese trabajo se redactará un proyecto que aporte la mejor solución para evitar las inundaciones en la calle Cádavo, del término municipal de Fene. Esta actuación quedará ratificada con la firma de un convenio de colaboración entre ambas administraciones, en el que queden recogidas las obligaciones y el presupuesto necesario para la obra, que se estima en 200.000 euros. Las previsiones de la Consellería son las de firmar el convenio y redactar el proyecto en este año.
Punto limpio en Vilar do Colo
Además Agustín Hernández le comunicó al regidor local que en breve se adjudicarán las obras de construcción del punto limpio que la Consellería llevará a cabo en el polígono deVilar do Colo y que dará servicio a los ayuntamientos de Fene y Cabañas. Las obras comenzarán antes del verano.
Saneamiento margen izquierda de la ría
Otro de los puntos tratados en la reunión, fue la situación de las obras de saneamiento de la ría de Ferrol. Hernández avanzó esta mañana que las obras de abastecimiento de la margen izquierda (zona Sur) de la ría de Ferrol, que abarca los ayuntamientos de Fene, Ares y Mugardos, estarán terminadas antes del verano. Destacó el esfuerzo inversor que está haciendo su departamento en la ejecución de esta actuación, que implica una inversión de más de 74 millones de euros.
La actuación consiste en construir una red de colectores que permita recoger los actuales puntos de vertido de la península de Ares, Fene y Mugardos, y conducirlos cara a una única instalación depuradora, en la que se tratarán para su vertido. Para esto, es necesario la construcción de más de 38 kilómetros de colectores, 5 pozos de bombeo y 23 tanques de tormenta para control de los aliviaderos en origen (redes existentes unitarias).
También se instalará una depuradora de aguas residuales (EDAR) biológica de aireación prolongada, con eliminación de nutrientes y desinfección previa al vertido al mar, que se situará en Punta Avarenta, en el ayuntamiento de Ares. De hecho, está pendiente la última conexión de la Edar al mar a través de un túnel, trabajos que se podrán ejecutar en dos jornadas, siempre que la climatología lo permita.
Tal y como señaló el conselleiro, con estas obras, que comenzaron en diciembre de 2008 y que previsiblemente terminarán en abril de 2013, se busca mejorar el saneamiento integral de la margen norte de la ría de Ares y de la margen sur de la ría de Ferrol, recogiendo y depurando las aguas residuales de estos tres municipios, lo que se traduce en una población beneficiada de 52.000 habitantes.
Agustín Hernández recordó que posteriormente, los ayuntamientos explotarán las nuevas redes de saneamiento y los bombeos correspondientes, mientras que la Edar será explotada por la Xunta; por lo que apeló a la coordinación entre la administración autonómica y local para la puesta en servicio de las instalaciones.
Saneamiento integral de la ría
El conselleiro de Medio Ambiente destacó el compromiso de la Xunta y del Estado con el saneamiento integral de la ría de Ferrol, proyecto en el que ambas administraciones aportan una inversión de cerca de 200 millones de euros y que supondrá una mejora histórica para esta ría de Galicia.
Recordó que estas actuaciones quedaron ratificadas en un convenio de colaboración firmado el pasado mes de julio, en el que se recogía la construcción y explotación de la actuación de interceptores generales de la margen derecha de la ría de Ferrol: tramo Cadaval – Neda y protocolo para el desarrollo de la actuación Colector Interceptador de la Malata.
Una serie de actuaciones que implican una inversión de las administraciones firmantes de más de 60 millones de euros.
