Era previsible

Pedro E. Sanz Sánchez

Todo el mundo lo entiende aunque unos se callan, otros aguantan y los de siempre lo critican por aquello de arrimar el ascua…,ya saben.

Era previsible que viniese el pensionazo,  ya que el país, España, no está para muchas fiestas y la economía se aguanta con hilos bien contados.

No queda más remedio que reconocer que lo heredado  (¡ya estamos otra vez recordando el pasado muy reciente!) ha sido paro, crisis económica y hasta crisis moral.

La situación es difícil y aquí solamente quedan dos opciones, o confiar o desconfiar, no valen medias tintas.

¿Confiamos en que el gobierno poco a poco nos vaya sacando del bache? ¿Desconfiamos del gobierno  que está incumpliendo su programa electoral?.

Muchos son los que creen en “los dientes de sierra”, que ya estamos en lo más bajo y que la economía irá mejorando. ¡Veremos!.

Otros muchos  critican lo que hace el gobierno, critican las directivas económicas. Nos dicen  que el equipo del PP es un lacayo de Alemania.

Lo cierto es que  tendríamos que confiar, pero…¡tremendo pero!.

Decía Santo Tomás que hay que tocar para creer. Los españoles también.

Este es un editorial corto, en el que solamente quisiera preguntar, después de lo anteriormente escrito ¿por qué?

¿Por qué se nos estuvo dorando la píldora por determinados dirigentes populares diciendo que los jubilados veríamos actualizadas nuestras pensiones?

¿Por qué determinados cargos públicos estuvieron diciendo que si, que había dinero  y si no, se sacaría de los fondos  sociales?

¿Por qué el propio señor Rajoy aseguró que los pensionistas no perderían valor adquisitivo?

¿Por qué si no hay fondos no se tiene en cuenta el IPC, por lo menos para las pensiones más bajas?

¿Por qué seguimos manteniendo organismos paralelos, Consejeros  de Estado  con dos o tres “sueldos”, asesores a cientos, traductores en el Senado, el propio Senado, embajadas  de CC. Autónomas, más de un canal de televisión en varias autonomías y así…un centenar de etc, etc.?

Mal, muy mal el señor Rajoy a pesar de que tiene toda la razón en el sentido de que “¿si no hay lana de donde la sacamos?”. Ese mal va dirigido directamente a no haber sabido  decir a su tiempo que no habría ni hay posibilidades de la subida ¡unas migajas! a los pensionistas.

Muy mal el señor Rajoy por no haber dado la cara al término de la reunión del Consejo de Ministros y permitir que aclararan la situación la vice presidenta y la ministra encargada “del ramo”.

Muy mal el señor Rajoy porque con su postura  nadie le podrá creer que a finales del año que viene o en 2014 esto va a mejorar, aunque pueda ser verdad.

Muy mal el señor Rajoy porque nos está dejando quedar muy mal a los gallegos, vuelven los tiempos de Pio Cabanillas en donde al estar en medio de la escalera nunca se sabía si subía o bajaba.

Muy mal el señor Rajoy porque parece seguir la frase lapidaria de que “ganen o pierdan yo gano, ganan los mios”.

Muy mal el señor Rajoy porque algunos dirán que no informó a su tiempo que no pensaba subir dignamente las pensiones por lo de las elecciones catalanas.

Muy mal el señor Rajoy por que …. mucho más podría añadir.

Y, aún así son muchos los españoles que están dispuestos a seguir confiando porque vale más malo conocido que bueno por conocer. Y no todo lo que se está haciendo es malo, sino tratando de salvar a esta España nuestra.

Aún así…la esperanza es lo único que se pierde.

Y los pensionistas….los de menos de mil euros podrán tomarse unos cafetitos, pocos. Y los demás.. por ahí va la cosa.

Y recuerden, decía el filosofo Séneca “ en la tormenta es cuando se conoce al buen piloto”. Tormenta tenemos, esperemos que el señor Rajoy sepa pilotar el barco y nos lleve a tierra firme. Entonces nos olvidaremos de los apretones de cinturón, de las volanderas pagas de Navidad, de los raquíticos aumentos a los pensionistas y de muchas cosas más. Y sino.. ¡Dios nos valga y nos coja confesados!.

 

 

Lea también

Editorial-Ignacio Frutos Ruiz, un «ferrolano» por todo lo alto

Desde Galicia Ártabra acogemos con satisfacción y alegría la noticia de que en el próximo …