El acto ha estado presidido por Manuel Navarrete, nuevo Mando de Fronteras tras ser varios años jefe del CITCO.
El Mando de Fronteras y Policía Marítima de la Guardia Civil, teniente general Manuel Navarrete, ha presidido este jueves en el puerto de Vigo la botadura del nuevo buque oceánico Duque de Ahumada, que tendrá entre sus misiones los rescates marítimos y la lucha contra la inmigración irregular, el narcotráfico o la trata de personas.
Se trata de un buque de grandes capacidades cuya inversión ha sido cofinanciada con fondos de la acción específica de equipamiento de la agencia europea Frontex. Su construcción se está realizando por los astilleros Armón y estará en servicio en el último trimestre de 2025.
El nuevo buque del Servicio Marítimo supone «un hito tecnológico de primer nivel y un importante incremento de las capacidades operativas en el desempeño de sus funciones en el ámbito marítimo«, según la información de la Guardia Civil sobre el acto de botadura presidido por Manuel Navarrete, que hasta ahora era jefe del Centro de Inteligencia contra el Terrorismo y el Crimen Organizado (CITCO) del Ministerio del Interior.
En concreto, se utilizará para la prevención de la delincuencia transfronteriza o la seguridad marítima y participará en misiones humanitarias, rescatando vidas y ofreciendo apoyo logístico a otras unidades de la Guardia Civil.
SUSTITUYE AL RÍO MIÑO
Este nuevo buque oceánico Duque de Ahumada sustituirá al Río Miño tras haber cumplido su periodo de vida útil. «Se trata de una embarcación que ayudará a preservar el medio marino al incorporar tecnologías avanzadas que minimizarán su huella ecológica y que contribuirán en la lucha contra la contaminación marina», según la Guardia Civil.
Dispondrá de cinco cubiertas, con helipuerto, dos embarcaciones de rápida intervención y un rov -vehículo submarino operado remotamente- para la inspección y rastreo subacuático de hasta un kilómetro de profundidad.
Además, estará dotado con equipos de navegación y comunicaciones de última generación, espacios hospitalarios y enfermería, área de seguridad y zona de náufragos para un mínimo de 100 personas.
30 DÍAS EN EL MAR SIN TOCAR PUERTO
Según la Guardia Civil, tendrá una autonomía superior a las 11.000 millas, con capacidad para permanecer en el mar sin tocar puerto de hasta 30 días. Podrá alcanzar una velocidad de 18 nudos y tendrá una velocidad de patrulla superior a los 11. Además, cuenta con alojamiento a bordo para 44 miembros de la tripulación y 12 personas ajenas a ella.
El Servicio Marítimo de la Guardia Civil está compuesto por casi 150 unidades navales entre buques oceánicos, embarcación de altura, patrulleras medias, ligeras y de apoyo. Este servicio de la Guardia Civil está desplegado en las provincias costeras. Además, existe un despliegue en África occidental con el destacamento de Senegal, otro en Mauritania y tres asistencias técnicas de vigilancia fluvial en Saint Louis y Kaolack (Senegal) y Banjul (Gambia).