Este martes, día 16. inició su despliegue, por un período de 7 meses, el personal laboral del Servicio de Prevención y defensa contra Incendios Forestales (SPIF) de la Xunta de Galicia, que se suma al resto del operativo autonómico. En total, son casi un millar de profesionales que venían trabajando 6 meses al año y que a partir de ahora, de manera progresiva, irán incrementando sus contratos hasta los 9 meses, en el horizonte de 2026.
Con esta medida, el Ejecutivo autonómico viene a reforzar su apuesta por un servicio contra incendios profesional, público y versátil. De esta forma, la decisión tendrá una repercusión muy positiva en la estabilización de estos puestos de trabajo y en la protección de nuestro medio rural, siguiendo la línea de lo que viene haciendo la Xunta con el fin de mejorar sus condiciones de trabajo y el servicio que prestan.
Este proceso viene a completar el desarrollado en los últimos años para incrementar progresivamente el período de actuación de los trabajadores de un dispositivo formado por más de 3.000 personas, de las cuales actualmente ya dos tercios trabajan todo el año. Una vez completado este nuevo proceso de estabilización, todos los integrantes del servicio trabajarán, como mínimo, a lo largo de 9 meses al año.
Precisamente, uno de los objetivos que se persigue con esta ampliación del tiempo de contratación es incidir en la prevención de los incendios, coincidiendo con la aprobación del plan preventivo que estará vigente hasta marzo de 2025.
Esta planificación se hace desde una fuerte apuesta por la ganadería en extensivo en áreas estratégicas del territorio. Entre otros hitos, se prevé actuar en 60.040 hectáreas de terreno, de las que unas 5.000 serán gestionadas a través de la ganadería en extensivo. El Plan está dotado con 41,1 millones -un 6% más respeto al del 2024-, y refrenda la apuesta del Gobierno autonómico por la planificación preventiva para luchar de una manera estructural contra los fuegos en zonas afectadas recorrentemente por los incendios.