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A las nueve de la noche de este Lunes Santo partía del lateral del templo de Nuestra Señora de los Dolores , del conocido popularmente como el «corralón», la procesión de Cristo Rey y la Virgen de la Amargura, único desfile procesional en esta jornada. En la misma figuraban varios tercios de la Cofradía, entre ellos el penitencial, que acompañaban a los pasos del Cristo y la Virgen. Hubo temor para su salida puesto que momentos antes había llovido, por o que se acortó el itinerario que este año se pensaba ampliar por Real y Arce para bajar a Magdalena. La procesión transcurrió con normalidad hasta el momento de la retirada en el que volvió a aparecer la lluvia.
CRISTO REY
El magnífico «trono” de Cristo Rey,“ que este año ha pasado por el taller de Cándido Hermida, donde se construyó en la década de los 80, para someterse a un cambio de banzos y el refuerzo de su estructura, portaba la imagen también restaurada el pasado año en los talleres coruñeses de Carmen Aguado de Soutomaior. La imagen pertenece al colegio del mismo nombre, que desde el año 1984 la cede a la Cofradía de Dolores para salir en sus desfiles. Eran las nueve y media de la noche cuando la imagen salía en el trono, con una escolta de honor formada por cuatro damas y caballeros alféreces de los Cuerpos Comunes de Defensa, mientras se interpretaba el Himno Nacional entre aplausos del numeroso público congregado en la zona.
Ante la iglesia de Dolores se dieron cita numerosos ciudadanos que aplaudieron la entrada del trono del Cristo en el «Corralón».
Hasta el año 2013 salió bajo la advocación del Cristo del Socorro y ya desde el año siguiente procesiona con el Tercio de Cristo Rey, formado en 2014 por padres, alumnos, exalumnos, etc, del dicho colegio, y conocido cómo “ o dos nenos” por la alta presencia de escolares. .
Los cofrades de este tercio vestían hábito negro y capuz de terciopelo bordado en oro, y capa de color azul.
LA VIRGEN DE LA AMARGURA
El “paso” de la Virgen de la Amargura era llevado a hombros por portadores del tercio de la Verónica sobre el nuevo trono de la Cofradía de Dolores y escoltado por alumnos de la Escuela de Especialidades de la Armada de La Graña.
Eran justo las diez de la noche cuando el trono salía del «Corralón» mientras la Agupación Musical del Cristo de la Buena Muerte interpretaba el Himno Nacional. La hermandad confió a los talleres de Cándido Hermida la completa remodelación de un trono que ya tenían, pero que era una simple estructura sin ornamento, dotándolo de un aspecto totalmente renovado y más coherente con el resto de su patrimonio. El trono lleva el escudo de Dolores en el frente y aplicaciones de plata. Asimismo figuran unas pequeñas imágenes marianas -de las Vírgenes del Carmen, Socorro, Pilar y Rosario, en homenaje a advocaciones con tradición en la ciudad- en sus cuatro hornacinas. Son nuevos los banzos de plata y se ha recuperado el plateado de los varales y jaras. El trono incorporó el pasado año, además, una nueva campana.
La Santísima Virgen de la Amargura, cuyo tercio celebra en este 2024 31 años, es una imagen tallada por el escultor sevillano Fernando Murciano Abad, que hizo en 2009 su primera salida. Va en un trono bajo palio y como curiosidad, la imagen lleva el pelo tallado recogido en un moño bajo, con un peinecillo dorado en el que figura la firma del escultor. Es una imagen de candelero y en dicha estructura lleva una estampa con una reliquia de Fray Leopoldo de Alpendeire.
Las cofrades de este tercio vestían hábito y capa de color negro y fajín y capuz morados. Este tercio está integrado solamente por mujeres.
La Virgen de la Amargura estrenó el pasado año su manto después de que se completase su bordado en el taller del andaluz Enrique Carrascal. La imagen lució esta prenda de terciopelo morado en años anteriores, antes de la pandemia solo con un adorno dorado en el borde y el año pasado ya con la primera fase del bordado, la de la parte posterior, si bien para este año ha podido completarse este rico trabajo, financiado con donaciones de cofrades. Este año se añadió una toca sobre el manto.
A su paso por la calle Real mientras el paso se detenía una mujer que lucía mantilla española le cantó una saeta a la Virgen de la Esperanza.
En la presidencia figuraban el comandante jefe de la Escuela de Especialidades de la Armada, capitán de navío José Luís Guevara Romero; el presidente de COFER, Cristóbal Dobarro; medallas de oro así como cargos directivos de la Cofradía del Santísimo Cristo de la Misericordia y María Santísima de los Dolores y de los distintos tercios.
La parte musical estuvo a cargo de la Agrupación Musical ACOTAGA (fundada en el año 2002) que seguía detras de la Cruz Guía; la Banda de la Amargura y la A.M. Cristo de la Buena Muerte ue cerraba el desfile procesional.
La procesión, contemplada por numerosos ciudadanos, recorrió las calles de Méndez Núñez, Real, Sánchez Barcaiztegui, Magdalena, Tierra, Real y Méndez Núñez.
A la retirada del trono de la Virgen de la Amargura, en la zona de la iglesia de Dolores, la Banda de la Buena Muerte entonó varias piezas en honor a la imagen titular, entre ellas «una saeta al cantar», finalizando con el Himno Nacional entre aplausos del público. A esa hora pasadas ya las once y media de la noche caía de nuevo la lluvia lo que hizo «aparecer» los paraguas.
