El sindicato CIG ha asegurado este lunes, en un comunicado, que las instalaciones de la lonja de Cariño, «están sufriendo un alarmante deterioro general» y que en ellas no se cumple la normativa de prevención de riesgos y salud laboral para los trabajadores.
Así, aseguran que el personal «carece de cualquier tipo de aseo sanitario en sus instalaciones de trabajo» y que el edifico tiene «goteras y fallos estructurales», algo que motivó que «la entidad Portos de Galicia cerrase sus instalaciones y trasladase a su personal, dejando al personal de la Xunta sin aseo y en unas condiciones sanitarias inadecuadas, inseguras y que incumplen la normativa básica».
El sindicato ha denunciado esta situación ante la Inspección de Trabajo que, afirman, «ha constatado la falta de cualquier tipo de aseos» y «llevará a cabo las actuaciones pertinentes».