El día 15 de octubre de 2021 el alcalde, por entonces, Ángel Mato, y el delegado del gobierno en Galicia, de aquella, José Miñones, presentaban a bombo y platillo en el salón de recepciones del concello el proyecto de la gran obra de transformación de la avenida de As Pías en un grandioso bulevar. Algo nunca visto, aunque hay que reconocer que ese proyecto ya había sido presentado en el año 2015 siendo ministra la pontevedresa Ana Pastor.
Pero ”lo chocante” es que el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana (Mitma) “puso en marcha la estrategia de humanización de travesías con la licitación del primer tramo de las obras de remodelación de la Avenida As Pías (FE-14), que discurre por los barrios de Bertón y de Caranza, en el municipio de Ferrol.
La humanización de la puerta de entrada a Ferrol era, es, una actuación prioritaria para Mitma puesto que la conversión en vía Urbana de 1,1 km de la carretera FE-14 supondrá una notable mejora para la seguridad vial y la calidad de vida de los vecinos. Así, este proyecto, que muestra el cambio ejercido en la política de carreteras, permitirá impulsar la movilidad sostenible y activa en la Avenida con la construcción de carriles bici y zonas verdes, ampliación de las aceras y la mejora del acceso al transporte público. Asimismo, romperá las barreras entre los barrios y ayudará a crear ciudad”, así se nos decía (que bueno es seguir las hemerotecas) que todo estaba ya en marcha.
Eso en octubre de 2021. Pero es que el 1 de junio de 2022 oficialmente comienza el inicio oficial de las obras aunque pasadas tres semanas no había maquinaria alguna en la zona… y desde aquella una locura. Cortes, más cortes, incluso en el túnel de la calle Nueva de Caranza, y poca maquinaria y menos obreros.
Total, que entre “dimes y diretes” el comentario general es el de que “las obras de palacio van despacio” a lo que muchos de los usuarios, pregunten por ejemplo a los taxistas, nos diran que la ”la obra de As Pías es una tomadura de pelo a la ciudania”.
No hace mucho el ex alcalde echaba en cara al nuevo regidor que todo lo que se estaba haciendo o proyectando correspondía a los «últimos cuatro años..«¿años de la victoria?, o de «¿Filipinas?».
Llegó a acusar al gobierno de José Manuel Rey de “vivir de rentas” y lo instó a “ponerse a trabajar” porque, aseguraba que “se le están acabando los proyectos del mandato anterior”. “Ahora que ya ha vendido como logros de su gobierno el convenio con Defensa, el proyecto para abrir Ferrol al mar, las obras en la calle San Francisco, las obras en la calle de la Iglesia o el derribo de la nave provisional, ¿ahora qué?”, se preguntó. Al hilo, Mato bromeó con que la dinámica del actual gobierno local por intentar apropiarse de proyectos del anterior mandato acabará con “Rey Varela presumiento de la calle de la Iglesia”.
Ni quitamos ni ponemos Rey, pero…..anda que no tiene color, por ejemplo lo del convenio con Defensa, cuando todo el mundo sabe, incluso los más avezados socialistas, que ese proyecto estaba guardado en el “baul de la Piquer” (perdone doña Concha) a pesar de comentar el entonces alcalde al mes de su toma de posesión que ese asunto iría para delante en pocas fechas. Fueron necesarios los votos a favor del PP para que ya a finales de mandato el Convenio saliese adelante. Como fue necesario llegar a acuerdos con la empresa encargada de la obra de la calle de la Iglesia para que pudiese cobrar y así seguir adelante, como fue necesario echar también adelante el proyecto de “ Abrir Ferrol ao Mar” que el PSOE quiso paralizar, denunciando a la Junta Electoral su reciente firma.
Las pérdidas de poder hay que saber asumirlas, hay que estar a las verdes y a las maduras, y menos decir en los plenos que “apoyamos” cuando después se sale en los medios, no en todos, diciendo lo que se dice, y criticando incluso el que un alcalde pueda ser senador mientras se está ascendiendo a cargos como el de responsable de relaciones institucionales (?) en la empresa a la que se ha vuelto, tras cuatro años sin estar en ella, y con cargo de menor rango (datos públicos que figuran en la web municipal).
Pero a lo que vamos, a lo de As Pías, tan vergonzoso es lo que está ocurriendo, las criticas son tan intensas, que en la mañana de este lunes, día 15 de enero, el alcalde ferrolano ha tenido que dar un golpe en la mesa en defensa de los intereses de su ciudad y de sus habitantes, también de los concellos cercanos, para decir que ““no tenemos información”, a pesar de que el regidor defiende “la colaboración entre administraciones”, recordando que el gobierno central se había comprometido a trasladar información al Ayuntamiento de Ferrol “y no cumplen”, en una obra que “está casi paralizada” y que afecta a barrios de la ciudad como Caranza, Esteiro, Ultramar y O Bertón.
El Ayuntamiento de Ferrol quería exigir el cumplimiento de los plazos al gobierno central de esta obra “como nosotros lo hacemos en nuestras obras”, en una ciudad “que no se puede parar, siendo necesaria la suma de esfuerzos de todas las administraciones.”. El regidor ha asegurado que al no contar con información, «lo único» que puede hacer es «observar como cualquier vecino» y lo que ve, ha añadido, es que «en los últimos meses están paralizadas»».
Sobran palabras, y abundan los culpables. ¿También tiene la culpa la actual corporación?. Pues hay que aclararlo, y decirlo bien alto porque seguro que habrá algún vecino que se crea que el concello tiene algo que ver en esta casi total paralización…y aquí no se nota la denuncia del equipo anterior.
¿Se esperará al resultado del 18 F por si por casualidad tocara la flauta y lo de las puertas giratorias continúan?. Realmente algunos las “matan“ callando.