A portavoz de Infraestructuras del Grupo Socialista, Patricia Otero presentó una pregunta en Comisión sobre un proyecto anunciado en 2001 que había debido finalizar en 2007 pero que a día de hoy solo tiene finalizados dos tramos que habían sido licitados en su día por el gobierno presidido por el socialista Pérez Touriño.
Otero criticó que el director de la Agencia de Infraestructuras había señalado hoy que el gobierno gallego está trabajando en “vías prioritarias” en las dos provincias, retrasando sine die una infraestructura que resulta fundamental para romper con el aislamiento de las comarcas de la Marina y Ortegal. Criticó que defiendan por ejemplo otras vías de comunicación como A Gañidoira “y echan por tierra el impulso a la VAC Costa Norte”.
La responsable socialista criticó que el gobierno gallego, en vez de desbloquear los 9 tramos que aún quedan por ejecutar de esta vía, señalen a la alcaldesa de Vivero, que tuvo que adaptar lo PGOM a la modificación impuesta por el gobierno gallego y con la que habían roto el consenso en el proyecto original para el Puente de Vivero. Explicó que la modificación fue iniciada en 2011 pero hasta 2017 no llegó el informe de Patrimonio, y el de Augas de Galicia se retraso hasta el año 2022.
Acusó a la Xunta de “faltar bastante a la verdad”, y le exigió que “se pongan a trabajar y entre todas las administraciones encuentren solución” para esta vía que, de seguir con el ritmo de ejecución impuesta por la Xunta desde la llegada de Feijóo y Rueda, no estará finalizada hasta el año 2o35.
La responsable socialista explicó que la obra, anunciada por el gobierno presidido por Fraga y con Xosé Cuíña como conselleiro en 2001, tenía que haber finalizado en 2007, pero fue abandonado en un cajón hasta que llegó el gobierno presidido por el socialista Pérez Touriño, que licitó los únicos dos tramos finalizados hasta el momento. Se trata de la variante de Xove, en Lugo, inaugurada en 2017, y la variante de Ortigueira, inaugurada en 2013, pero desde entonces la obra sigue parada.