En el ecuador de la Semana Santa Ferrolana, en este Jueves Santo, Día del Amor Fraterno, fueron tres las procesiones que desfilaron durante la tarde y noche en una jornada en la que también fue noticia el buen tiempo reinante y el total abarrote de las calles de la ciudad, en especial en la zona de A Magdalena.
Miles de personas presenciaron los desfiles procesionales del Cristo de la Buena Muerte y Virgen del Perdón y de la Misericordia, de la Cofradía de la Soledad; el de la cofradía de Nuestra Señora de las Angustias; y ya a la noche el del Cristo de la Misericordia y Virgen de la Piedad.
PROCESIÓN DEL CRISTO DE LA BUENA MUERTE
Así, la Procesión del Cristo de la Buena Muerte, imagen ligada históricamente a Ferrol Vello y que la Cofradía de la Soledad suele llevar por dicho barrio el Martes Santo, abrirá el programa de la tarde del Jueves Santo y caminará en esta ocasión por el barrio de A Magdalena. Las obras que se desarrollan en la calle San Francisco han llevado a la hermandad a variar recorrido y día.
A las 18.30 horas salió el desfile procesional desde la glorieta de Alfredo Martín y avanzó por la calle Real para bajar por San Diego a la Magdalena, desde la que subiño por Concepción Arenal para regresar por Real.
Como ya sucedió el pasado año, la Cofradía de la Soledad sacó junto a la imagen del Cristo de la Buena Muerte, la talla de la Virgen del Perdón y la Misercordia una talla de Juan José Negrí Acevedo.
PROCESIÓN DE LAS ANGUSTIAS
A las 19.30 horas salió del santuario de Esteiro la Procesión de la Cofradía de Nuestra Señora de las Angustias. Se trata del desfile “titular” de la hermandad, que este año celebra los 255 años de su refundación y que, además, llevó por primera vez la imagen de las Angustias coronada. Es un hito en la historia de la hermandad y de la propia Semana Santa de Ferrol, que nunca antes había visto coronada canónicamente una imagen. La ceremonia se celebró el pasado 12 de junio, coincidiendo con la celebración patronal de la Virgen de las Angustias.
Es este el desfile más largo, en distancia recorrida, de la Semana Santa de Ferrol. Discurrió primero por Esteiro, barrio al que está ligada la Cofradía de las Angustias y se adentró después en el de A Magdalena. Además de la Virgen, la hermandad sacó en el desfile procesional las imágenes de Jesús Nazareno –que este año ha sido sometido a rehabilitación-, el Cristo de la Agonía y el Yacente. En esta procesión participó la Unidad de Música del Tercio Norte, que interpretó en el recorrido las marchas “Virgen de las Angustias”, escrita hace años por el maestro Romo, subdirector de la propia banda, y la más reciente “Angustias Coronada”, compuesta por su actual director, Luis García Cortizas, y que se estrenó el 12 de junio en el acto de la coronación canónica.
Cabe recordar que, como ya sucedió el Domingo de Ramos, el recorrido varió ligeramente para evitar los edificios vallados de la calle Carlos III en los que se produjo un aparatoso derrumbe. El desfile subió por Fernando VI tres manzanas y luego se incorporó por Españoleto a la calle Carlos III para seguir con su itinerario habitual.
Abría marcha a la procesión la Cruz Guía el tercio y el paso de Jesús Nazareno, conocido como «el de Medinaceli», obra de Florencio Severo Gambino del siglo XVIII. La ornamentación del trono de caoba era a base de flores moradas. Sus cofrades vestían túnica negra y capa capuz morados.
El paso del Cristo de la Agonía, obra también de Gambino, datada en 1789. Sus cofrades portaban hábitos negros y capa y capuz dorados.
El tercer paso, el del Yacente, obra de Guillermo Feal del año 1957 iba adornado, muy sencillo, con unas rosas rojas, a su lado cuatro hachones de cera. Sus cofrades vestían hábito negro y capa y capuz azules. Seguía al Yacente una capilla música.
Y ya por último el paso de la Virgen de las Angustias. Un trono de plata adornado con numerosas flores blancas entre las que destacaban las gerberas y gladiolos. Los cofrades vestían hábito negro y capa y capuz blancos. Daba escolta un grupo de gastadores del Tercio del Norte de Infantería de Marina y detrás del trono cerraba la procesión la Unidad de Música del Tercio del Norte. Destacar la participación del tercio de Jesús Redentor de la Cofradía de la Merced.
La parte musical estuvo a cargo de la Agrupación M. Nosa Señora do Nordés (OJE); Banda de las Angustias, Banda Municipal de Oza-Cesures , capela Musical y Unidad de Musica del Tercio Norte de la Infantería de Marina.
COFRADIA DEL CRISTO MISERICORDIA Y VIRGEN DE LA PIEDAD
A las once de la noche dio comienzo la procesión del Cristo de la Misericordia y María Santísima de la Piedad, que ofrece con sus imágenes un breve resumen de la pasión del Señor. La procesión del Cristo de la Misericordia fue la primera en la que participaron cofrades de hábito y con las características de la moderna Semana Santa Ferrolana.
En esta procesión figuraba en primer lugar el paso de Jesús de la Salud en su Oración en el Huerto (un paso de misterio que la hermandad estrenó el año pasado) que sustituyó a la imagen adquirida por el Ayuntamiento ferrolano en los talleres de Arte sacro de Olot en el año 1954.
Seguía el paso de Jesús Cautivo. Una talla de madera obra de Florencio Guerra Felipe en el año 1893. Figuraban también un guardia del templo, adquirida a una hermandad de Guadix y un centurión romano. El paso, plateado, iba adornado con claveles rojos.
Nuestro Padre Jesús Nazareno. Obra de madera de caoba tallada y policromada realizada en el año 1893 por Francisco Florencio Guerra Felipe. La ornamentación floral del trono, una magnífica obra en caoba, consistió en rosas moradas e iris morados.
Cristo de la Misericordia. Es una hermosa talla procedente de los talleres sevillanos del afamado escultor Manuel Romero Benitez. Fue adquirida para sustituir a la primitiva a la que se decidió retirar de procesionar. El trono, plateado, iba adornado con flores rojas. Le daban escolta una escuadra de gastadores de la Brilat, con guiones y banda de música.
Al paso del Cristo de la Misericordia ante la capilla de los RR.PP. Mercedarios se abrieron las puertas del templo y «salió al encuentro» del Crucificado la imagen de la Virgen de los Cautivos, entregando una rosa blanca, de las que el día anterior había formado parte del adorno flora de su trono y siendo depositada en el campo de claveles rojos que adornaban el del Cristo
En la presidencia figuraban el presidente de la Xunta de Galicia, Alfonso Rueda; el nuevo delegado del gobierno en Galicia, José Ramón Gómez Besteiro; el alcalde de la ciudad, Ángel Mato; el almirante jefe del Arsenal, Vicealmirante Ignacio Frutos Ruiz ; la vicepresidenta segunda del Congreso de los Diputados, Ana Pastor Julián; los senadores populares, ferrolanos, Verónica Casal y Miguel Tellado; la diputada nacional, socialista, Natividad González; Bieito Rubido, nuevo cofrade de honor y medalla de oro de la Cofradia; delegada territorial de la Xun,a Martina Aneiros;el parlamentario gallego, José Manuel Rey Varela; mandos de la Brilat; el presidente de la Cordinadora de Cofradías, César Carreño; así como miembos de la corporación municipal y numerosas autoridades civiles y militares y medallas de oro de la Cofradía.
Acompañando a su Cristo iba el tercio de la Penitencia portando pesadas cruces que arrastraban por las calles ferrolanas imitando el paso de Nuestro Señor camino del Calvario.
Finalmente cerraba la procesión la bella imagen de la Piedad, en trono de palio con su palio totalmente renovado que la cofradía estrenó ya el Lunes Santo con la Virgen de la Amargura, iba adornado con rosas blancas.
Esta imagen iba acompañada por sus cofrades, todas mujeres mayores de edad. La imagen de la Virgen, también llamada del Mayor Dolor es una talla de madera policromada de autor anónimo y datada en el siglo XVII. Vestía un traje de satén bordado en seda , babero y toca de encaje de blondas. El manto de terciopelo de Lión, color azul, con aplicaciones de plata está rematado por una mantilla de hilo de plata realizada en los talleres sevillanos de Fernando de la Poza. La Virgen está coronada por una pieza de plata de estilo imperial .
El «paso» era acompañado por una escolta del Tercio del Norte.
Al finalizar la procesión, que recorrió las calles de Méndez Núñez, María, Arce, Magdalena, Carmen, Real, y Méndez Núñez, los componentes de la Brilat cantaron al Cristo y a la Virgen «La muerte no es el final» y «Una Madre no se cansa de esperar». Numerosísimas personas, varios millares, se dieron cita en la finalización del desfile procesional y premiaban con continuos aplausos la retirada de las imágenes, bailadas por los portadores, y las interpretaciones de los miembros de la Brilat.
La parte musical estuvo a cargo, además de la Brilat, de Acotaba, la Agrupación Musical del Cristo de la Buena Muerte, la de la Virgen de la Amargura, la Banda de la Cofradía de Dolores y la Xove Banda de Narón.