Un hombre, F.S.L. de 65 años, natural de Madrid, ha fallecido en la madrugada de este domingo tras declararse un incendio en el bajo del inmueble número 64 de la calle Carlos III, en el barrio de Esteiro, en Ferrol. Además, una mujer ha tenido que ser evacuada por inhalación de humo.
Fuentes de los Bomberos han señalado que el incendio se produjo sobre las 4,00 horas. Hasta el lugar acudió en un primer momento un equipo del servicio de extinción, pero al llegar al punto solicitaron la intervención de un equipo de rescate, ya que comprobaron que había «atrapados» , desconociéndose el numero, en el interior del inmueble, dadas sus características.
Así, en total, se desplazaron dos dotaciones de bomberos del parque ferrolano con ocho profesionales que trabajaron en la extinción de este fuego.
Asimismo acudieron al lugar efectivos de Urxencias Sanitarias de Galicia-061 con una ambulancia y de la Policía Local.
Según han precisado los bomberos, en la primera habitación que desalojaron había una persona que consiguió salir por sus propios medios. A continuación, los servicios de emergencia lograron sacar también a una mujer, de origen brasileño,P. C. R., de 49 años de edad, que tuvo que ser evacuada por inhalación de humo a los servicios de urgencias del hospital «Arquitecto Marcide» del Complejo Hospitalario Universitario-CHUF.
Posteriormente, hacia la parte de atrás del bajo de la vivienda, que cuenta con un patio exterior, los bomberos localizaron en un ‘galpón’ otra habitación en la que se encontraban dos personas, entre ellas, un hombre con movilidad reducida, por lo que decidieron confinarlos allí hasta que lograron extinguir el incendio.
Durante las labores de extinción los ocupantes de la vivienda advirtieron de la ausencia de una persona que podría encontrarse en otra habitación del pasillo. De este modo, tras tirar abajo una de las puertas que se encontraba cerrada, los bomberos encontraron el cuerpo del hombre prácticamente fallecido, posiblemente a causa del humo almacenado en la habitación, ya que a pesar de los esfuerzos del personal del 061 fue imposible salvarle la vida.
Al parecer el fuego se inició en una habitación en la que al llegar los bomberos no había ninguna persona en ella,
En el lugar del suceso se personó el médico forense que autorizo el levantamiento del cadáver y su traslado en un furgón judicial al hospital naval en donde se le practicará la autopsia. Posteriormente el cadáver será llevado a la cámara judicial a la espera de localizar algún familiar del fallecido. Al parecer era atendido por los servicios sociales de Cáritas Diocesana por lo que esta ONG de la Iglesia se hará cargo de los gastos del enterramiento.
El bajo estaba destinado a una pensión aunque no estaba registrada de forma legal y en ella, según vecinos de la zona, veían albergarse a inmigrantes y ciudadanos en mala situación económica.