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La Policía Local de Ferrol recibió ayer los dispositivos que forman parte de su nuevo sistema de videovigilancia del tráfico. Está integrado por cuatro cámaras especiales, que se conectan las dos tablets con red de datos y dos impresoras que se montarán en los coches patrulla según las necesidades de cada servicio. Estos equipos les facilitarán a los agentes el control de la circulación y del cumplimiento de las normas, ya que son capaces de leer las matrículas sin llegar a error aún en movimiento.
Además de identificar infracciones como el estacionamiento en doble fila o sobre aceras y verificar el tiempo de aparcamiento de cada vehículo en las calles, los aparatos permitirán realizar otro tipo de labores, como comprobar de manera inmediata la situación administrativa de cualquier vehículo. Por ejemplo, si cuenta con seguro, si pesan sobre el precintos o embargos o si tiene al día la inspección técnica. También alertará a los agentes cuando detecte vehículos que consten como robados o de los que se sospecha que se emplean en actividades ilícitas, de la misma manera que de los que sean utilizados usualmente por conductores multirreincidentes o delincuentes.
Labor de concienciación ciudadana
Está previsto que en los próximos días los agentes municipales reciban formación específica para el manejo de los equipos, tras el cual el sistema de videovigilancia comenzará a funcionar. Para su puesta en marcha se abrirá un período informativo durante el que se hará público el tipo de infracciones que detecta con más frecuencia y en que puntos de la ciudad. En este primer momento se tratará, en palabras del concejal de Seguridad y Tráfico, Germán Costoya, de llevar a cabo “una labor de concienciación ciudadana” para que se respeten las normas de circulación.
Los nuevos dispositivos de videovigilancia son totalmente portátiles y se pueden colocar en los coches patrulla en cuestión de minutos. Cada una de las cuatro cámaras cubre un campo de visión de 90 grados, por lo que, dependiendo del servicio que se planifique, se instalarán las cuatro en un mismo vehículo policial (para comprobar la situación de toda la vía) o solo dos (un lateral). Su versatilidad permite incluso que se emplee una sola cámara, con la única condición de que esté disponible una fuente de alimentación eléctrica. Esto es especialmente útil para poder hacer un recuento de vehículos que circulan cada día por una determinada calle o carretera, con el fin de conocer el tráfico que soporta, o para mejorar la efectividad de los controles policiales: ubicada la cierta distancia, sirve para advertir a los policías de la llegada de vehículos y ofrecerles su historial. Esto es posible gracias a que el sistema dispone de la herramienta telemática Atex, que permite a las entidades locales consultar directamente con la Dirección General de Tráfico información sobre vehículos y conductores.
Los procedimientos habituales para el control del tráfico son dos. Uno consiste en la captación de imágenes para que el propio agente las vaya revisando y determinando cuáles son las infracciones. Otro, en que el propio policía, mientras el coche dotado de cámaras hace labores de vigilancia, indique de forma manual cada infracción que debe quedar registrada por las cámaras. Por otra parte, el sistema dispone de varios modos de funcionamiento, que se pueden configurar para realizar labores muy concretas, como revisar específicamente la doble fila o el estacionamiento sobre aceras. En todos los casos, la verificación final sobre si se debe emitir una sanción o no corresponde al agente.
