Las obras para la ampliación de la carretera de Pazos comenzarán la próxima semana. Técnicos de la adjudicataria de esta actuación le trasladaron ayer al concejal de Urbanismo, Julián Reina, que la empresa está en disposición de que así sea, después de que a partir del lunes se verifique la situación de tendidos eléctricos y canalizaciones en la zona. Fue durante el recorrido que el edil hizo por el tramo en el que se van a llevar a cabo los trabajos, en el que, además, estuvo acompañado por técnicos municipales y por representantes vecinales. Estos últimos le explicaron a Reina que el ensanche de la carretera y la construcción de aceras constituye una reivindicación histórica del vecindario y que la obra a punto de comenzar viene a dar respuesta a esta demanda. También, que va a solucionar los problemas de seguridad viaria en un punto especialmente peligroso en el que los peatones casi no disponen de espacio para transitar.
El inicio de los trabajos va a significar modificaciones en el tráfico de la zona. Dependiendo del momento, se prohibirá el paso de vehículos tanto en el inicio de la vía en la carretera de Xoane como en el otro extremo de la actuación, en las cercanías de la ponte sobre el río de la Sardina, puntos donde se señalizará convenientemente el cierre al tráfico. Como excepción, sí estará permitida la circulación de residentes en la zona afectada.
El contrato de las obras, que ejecutará la empresa Copcisa S.A., se firmó el pasado 10 de febrero. El importe es de 396.911,84 euros, IVA incluido. Si los trabajos se desarrollan según la programación, podrían estar finalizados en la segunda mitad del mes de octubre.
Las actuaciones contempladas en el proyecto consisten en la mejora de la movilidad peatonal y la seguridad viaria en un tramo de 540 metros, entre el cruce con la DP-3603 y la ponte sobre el río de la Sardina. Se ampliará la plataforma actual de la carretera dotándola de un espacio diferenciado y seguro para el tránsito peatonal por la margen izquierda y se proveerá de servicios enterrados bajo la acera para sustituir el entramado aéreo actual. También se renovarán el mobiliario urbano y el alumbrado, se instalará una barandilla para la protección de los viandantes y se colocarán nuevas marcas de señalización viaria longitudinal y transversal.
La intervención en la carretera de Pazos, en esta primera fase que se va a poner en marcha, incluye también la ampliación del mencionado puente, una construcción de hormigón armado que se ancheará con materiales similares y respetando el curso de agua. La sección hidráulica será mejorada con respeto a la actual pasando de 1,46 metros de altura útil a casi 1,48-1,50 y manteniendo intacto el canal.