Agentes de la Policía Local formularon una propuesta de sanción contra una mujer que le arrojó pescado a un empleado de la concesionaria del servicio de limpieza. Los hechos se remontan a la madrugada del pasado viernes, 29 de mayo, cuando el trabajador se encontraba en la calle de A Coruña. El hombre dio aviso al 092 y poco después se presentó en el lugar una patrulla. Les indicó a los agentes que desde una ventana alguien le había lanzado varios pescados, que aún se podían ver desparramados por la calle. Los policías timbraron en el inmueble y subieron hasta el piso. Una vez en la puerta, hablaron con varias personas que residen en la vivienda, las cuales reconocieron que una de ellas era la autora de los hechos. Tras ser identificada, bajó a la calle, recogió el pescado y lo depositó en el colector de la basura.
Un día antes, en la tarde del jueves, otra patrulla descubrió escombros, cachos de maderas y botes de pintura, entre otros restos de material de construcción, en el interior de un contenedor de residuos orgánicos de la calle Río Sor. En las cercanías del lugar consiguieron identificar al hombre que había depositado todos esos elementos de forma irregular, el cual reconoció que así lo había hecho, aunque, según alegó, consideraba que era poca cantidad. También fue propuesto para sanción por incumplir la ordenanza de recogida de residuos sólidos urbanos.
Finalmente, en la madrugada del domingo, 31 de mayo, la Policía Local tuvo que intervenir en una fiesta que se celebraba en un piso de la calle Sol. Los agentes oyeron música, gritos y golpes procedentes del cuarto andar de un edificio, por lo que acudieron a la vivienda. Comprobaron que en el interior, además del propietario, se encontraban grupo de personas que no residían allí, por lo que se les recomendó abandonar el domicilio. Todos fueron identificados.
No se preocupen.
A esta la declararán insolvente, incompetente, dependiente, trastornada, etc., y le acabarán dando una paga, que es lo que busca, y qué como no, vamos a pagar los demás.