Este lunes, el portavoz municipal del BNG, Iván Rivas quiso analizar la situación de los presupuestos en Ferrol tras ser presentados hace dos semanas, recordando que “os consideramos un avance, rompendo coa austeridade de estos anos de PP e Ferrol en Común”, en una apuesta presupuestaria “que hai que facela se se quere conseguir os obxetivos.”
Lo que no le gustaba a Iván Rivas es que este borrador de presupuestos “continuamos na senda de privatización dos servizos básicos do Concello”, con el que los vecinos “terán máis cargas a nivel fiscal, con máis impostos ou taxas”, porque el gobierno municipal “está querendo dedicarlle máis orzamento a privatizacións, que en persoal municipal.”
El tema de contratación de personal “é unha escusa” para el BNG “porque ninguén se cree que non se poida contratar”, porque si se realiza una consolidación en Bomberos “isto pode aplicarse a outros servizos da cidade”, pero la opción de la externalización “é máis rápida, pero é máis cara”, como es el caso de Sogama o los “incrementos” de la tasa de agua y recogida de basuras.
En Ferrol “seguimos cargando os servizos aos veciños”, mientras que hay empresas “que non pagamos os tributos, como Emafesa ou Autoridade Portuaria”, como también criticaba la adquisición del multacar “para incrementar a inversión en multas, para que paguen os veciños e veciñas.”
Iván Rivas reconocía que mantuvo una reunión hace diez días con el gobierno municipal para hablar del borrador de los presupuestos municipales y desde aquella “é incomprensible a parálise, o gobernó no nos di nada”, donde les preguntó cuando querían tener aprobados los presupuestos “e non nos responderon.”
El portavoz nacionalista reconocía que en este debate presupuestario “queríamos partir de cero para chegar a algún acordo”, recordando que hay peticiones que tienen que estar como el muro de contención en Santa Mariña o la pista polideportiva de Mandiá, donde “cada vez que hai un orzamento, tenemos que insistir nisto, no que estamos todos os grupos de acordo.”
Desde el BNG querían pedirle a los grupos políticos de la ciudad “que fagan política e non electoralismo, porque temos que aprobar xa os orzamentos”, al estar ya en el mes de marzo y, en el caso de que se aprueben en el mes de abril, con todos los trámites administrativos posteriores a la aprobación plenaria “os orzamentos non enterían en vigar ata xuño e quedarían sete meses para facer todo o de 2020 e habería moitas dificultades para sacalo adiante.”