El Concello comenzó a retirar los restos de la casa que el temporal derribó ayer en la calle de Carlos III. Esta intervención urgente, que ejecuta desde esta mañana a concejalía de Servicios y Obras, se está realizando a través de una empresa. Los responsables de esta firma calculan que podrían finalizar el trabajo hoy mismo, según le manifestaron a la concejala Ana Lamas. El alcalde, Ángel Mato, y el edil de Urbanismo, Julián Reina, se acercaron ayer al lugar, nada más producirse el siniestro, para interesarse por la situación, mientras la Policía Local establecía un perímetro de seguridad, que implicó el cierre de la calle de Carlos III a la altura del número 22 y de la travesía de Moreno en la intersección entre ambas veías. El propio Reina regresó esta mañana acompañado por técnicos municipales, que están determinando las medidas para consolidar la edificación.
La concejalía de Urbanismo ya está en contacto con la propiedad para que en el plazo de 48 horas se ejecuten los trabajos necesarios para garantizar la estabilidad de muros y otros elementos constructivos. En el caso contrario, esta actuación se realizará de oficio por parte del Concello. Se trata de “evitar posibles desprendimientos y riesgos para los vecinos, además de poder abrir lo antes posible la calle al tráfico de vehículos y al paso de personas y reducir así las molestias que se habían podido producir”, explicó el edil.
Tanto él como Ángel Mato pasaron a tarde de ayer y parte de la noche revisando diferentes puntos de la ciudad en los que el temporal produjo daños. Efectivos municipales llevan a cabo desde entonces trabajos de urgencia para solucionar los problemas causados por las fuertes rachas de viento y la lluvia, como pueden ser la retirada de vidrios rotos u otros elementos desprendidos de edificios.
Julián Reina manifestó su deseo de que el derrumbamiento de la fachada de Carlos III, “en el que por suerte no se tuvo de lamentar ningún daño personal, sirva de aviso a los propietarios de construcciones deterioradas”. El concejal dijo que deben “ser conscientes de la necesidad de acometer aquellas actuaciones que garanticen la seguridad”.