Esta noche, a partir de las 20:00 horas, el Teatro Jofre acogerá la entrega del Premio 8 de marzo a la científica ferrolana Rebeca Atencia. En la mañana del lunes la premiada era recibida en el Concello de Ferrol por el alcalde Jorge Suárez y la concejala de Bienestar Social, Sainza Ruiz.
Sainza Ruiz recordaba que este premio “foi aprobado por unanimidade no pleno”, algo de lo que también se alegraban “no Consello Sectorial da Muller”. Este premio sirve para poner en valor “a mulleres como Rebeca Atencia, como tamén Ángeles Alvariño, Ángela Ruíz Robles ou Concepción Arenal.”
La concejala destacaba de la premiada su “compromiso co movemento animalista”, como también en la lucha contra el coltán en el Congo, reconociendo que Rebeca Atencia “está chamada a ser una das grandes científicas do século XXI.”
Rebeca Atencia, que actualmente está al frente de la Fundación Jane Goodall, reconocía que estaba “muy contenta y es un honor que me den un galardón así”, afirmando que cuando emprendía la aventura de trabajar en el Congo “buscando sueños y objetivos, sin ser diferente por ser mujer”, en un país “donde hay que ser valiente”, en sus comienzos dirigiendo a un equipo formado por veinte hombres “en un lugar donde los animales pueden atacar por todas partes y da igual ser hombre o mujer.”
Actualmente el trabajo de Rebeca Atencia se centra en “trabajar en la conservación del medio ambiente, en concreto del chimpancé”, con el objetivo de buscar el equilibrio entre el medio ambiente y los seres humanos, como también “protegiendo a la gente, valorando a las comunidades que está alrededor a la reserva, dando trabajos dignos, siendo la gente local la que se pueda encargar, con una economía sostenible.” Con esto consiguen “que se den cuenta del beneficio de la selva sin tener que destruirla, porque eso también acaba con los ríos y el oxígeno”, porque “si se disminuye los pulmones del mundo nos afecta a todos.”
Su trabajo con las mujeres en el Congo no ha estado exento de problemas porque “cuando llegué di puestos de responsabilidad en función de las capacidades de cada uno, sin fijarme si es hombre o mujer”, pero las mujeres que tenían estos puestos “recibían insultos y yo tuve que apoyarlas”, poniendo también como ejemplo lo que les sucedía a las mujeres que conducían vehículos “algo que allí no era tan habitual, siendo paradas por la Policía muchas más veces o incluso les mordían su carnet para ver si era de verdad.”
El alcalde de Ferrol, Jorge Suárez destacaba que era “exemplar o amor polo seu traballo, sendo unha imaxe de igualdade entre homes e mulleres”, donde todas las personas deberían tener las mismas oportunidades “sexa no Congo, nun Consello de Administración ou en outros postos”, porque la valía “se mide por cuestións humanas”, por lo que para el Concello de Ferrol era “un orgullo poder darlle este galardón”, recordando la aprobación por unanimidad de los 25 concejales y concejalas de la corporación ferrolana.