El presidente del comité de empresa de Navantia Ferrol, Javier Galán, ha pedido este jueves a las partes implicadas en la negociación de las condiciones laborales en la industria auxiliar de los astilleros que logren avances en los próximos días y ha advertido de posibles medidas de presión en caso contrario.
«Ya avisamos a Navantia de que va a haber problemas», ha asegurado en una rueda de prensa conjunta de todos los sindicatos del grupo público.
Así, ha demandado que se pueda «solventar este conflicto antes de que termine julio».
El representante de Comisiones Obreras ha considerado que es «posible que tengamos movilizaciones» si patronal y centrales sindicales no concretan un pacto, que ha contado con mediación tras la huelga de los operarios auxiliares en 2017.
De este modo, ha declarado que la «semana pasada hubo dos reuniones con las federaciones en la mesa de negociación», sin que se alcanzasen novedades sustanciales.
Por ello, ha reivindicado que el departamento autonómico de Relaciones Laborales actúe para reconducir las conversaciones.
«No se puede seguir prorrogando hasta septiembre, instamos a las partes a que lleguen a un acuerdo», ha indicado Galán.
En su comparecencia, ha observado que la «única solución» posible pasa por incluir el nuevo marco regulador «como disposición transitoria en el convenio provincial del metal».
A este respecto, ha apostillado que las organizaciones sociales están «insistiendo a Navantia» en torno a la «necesidad de que las licitaciones para la industria auxiliar» apelen al «cumplimiento estricto del convenio».
Según el presidente del comité de empresa de Navantia Ferrol, «no es bueno que haya conflicto», pero ha estimado que el hecho de que hayan transcurrido nueve meses desde el fin de la huelga en las auxiliares convierte en excesivo ese período de espera.
Para los sindicatos, la nueva reunión entre las partes, fijada para el 18 de septiembre próximo, se llevaría a cabo en una «fecha demasiado lejana».
En esta línea, han subrayado que exista un principio de acuerdo para la actualización de los salarios
Las amenazas son propias de los macarras, y los millones de euros que hicieron perder a Navantia el año pasado nos los han hecho perder a todos sus propietarios (que somos los españoles). Si empezamos con sus argumentos falaces yo insistiré en mis preguntas que no respondieron el año pasado: ¿Cuánto cobran? ¿Cuánto quieren cobrar?
Que es lo que nunca dicen los sindicatos que «negociaron» en los ochenta hasta que les untaron por prejubilar a miles de trabajadores y aceptaron que se amortizaran sus puestos sin pensar en el futuro de la ciudad, demostrando su egoísmo sin par. El año pasado trabajadores de Navantia afiliados a un sindicato bloquearon un mes el astillero para exigir que a trabajadores de empresas privadas les aplicaran un convenio de Navantia que no estaba en vigor, que nadie se olvide.
Yo no he visto peor pandilla, que sólo están tranquilos cuando no hay barcos en las gradas y se pueden tocar las narices.
Por cierto: Recuerdo que estos mismos boicotearon la botadura y construcción del BAM, con lo bueno que habría podido suponer para la imagen de la ciudad.
bla bla bla va para casi un año de la huelga de auxiliares y na de na que cojan el macho y a currar que va siendo hora