Nicolás Franco Bahamonde nació en Ferrol, el 1 de julio de 1891 (+ Madrid, 15 de abril de 1977) fue un militar y político, participante en la sublevación militar contra la II República que dio origen a la Guerra Civil Española. Era el hermano mayor de Ramón, Pilar, María de la Paz y Francisco Franco Bahamonde, quien asumió la jefatura del Estado tras el conflicto.
Su padre, Nicolás Franco Salgado-Araújo, fue General Intendente de la Armada Española, y su madre, María del Pilar Bahamonde y Pardo de Andrade, provenía de una familia con una gran tradición en la Marina.
Continuó la tradición marinera de la familia ingresando en la Escuela Naval Militar de Marín, en Pontevedra,donde alcanzó el grado de Oficial de la Armada Española, y en la Escuela de Ingenieros
Navales, donde coincidió con Juan Antonio Suances, y se graduó como Ingeniero Naval.
Comenzó su carrera política durante la II República, llegando a ser Secretario General del Partido Agrario que presidía José Martínez de Velasco. De 1932 a 1934 ocupó el cargo de director de la Escuela Superior de Ingenieros Navales, y en 1935 fue nombrado director general de la Marina Mercante Española, a las órdenes del ministro de Marina Pedro Rahola, durante el mandato de Joaquín Chapaprieta.
Guerra civil y nombramiento de Jefe del Estado
Siendo su hermano Francisco uno de los principales participantes en el levantamiento del 18 de julio de 1936, pronto se convirtió en uno de sus más importantes colaboradores, y tuvo gran influencia en la decisión de su nombramiento como futuro Jefe de Estado.
Nicolás Franco jugó tímidamente, durante los primeros meses de la guerra civil, el difícil papel de Luciano Bonaparte, es decir, el hermano más inteligente del nuevo hombre todopoderoso. Su aspiración se vería pronto frustrada por la llegada a Salamanca de Ramón Serrano Súñer, hermano político del generalísimo Franco, gran jurista y constructor de la estructura del nuevo Estado.El historiador Hugh Thomas relata así en su libro «La Guerra Civil Española» la intervención de Nicolás en el nombramiento de su hermano Francisco como Jefe de Estado: «El 29 de septiembre, Kindelán, Orgaz, Yagüe y Franco llegaron a Salamanca en avión. Franco fue recibido como «Generalísimo» por una escolta de falangistas y carlistas enviados a este fin por Nicolás Franco. En la reunión con la Junta, Kindelán leyó un decreto confirmando ese título y añadiendo el de “Jefe de Gobierno” En ese momento, los generales reunidos acogieron fríamente la propuesta. ¿Por qué añadir responsabilidades políticas a las responsabilidades militares del Generalísimo? Cabanellas dijo que deseaba más tiempo para considerar el decreto. La reunión fue suspendida para el almuerzo, durante el cual, a través de veladas amenazas y alabanzas, Kindelán consiguió que se aceptara la designación que deseaba para Franco. A Cabanellas se le autorizó a que demorara dos días su consideración” para no herir su orgullo.»
El texto original del decreto aceptado por los.generales ese día 29 hablaba de Franco como Jefe de Gobierno. Pero un mensajero especial de Nicolás Franco llegó a la imprenta en motocicleta para alterar el texto en el último momento en el sentido de nombrarle «Jefe de Estado», y así fue como se promulgó el decreto.» Sin embargo, aún se conservan boletines oficiales del Estado en los que Francisco Franco aparece sólo como «Jefe de Gobierno
Embajador en Portugal y control de don Juan
Su actividad durante la guerra se desarrolló como embajador en Italia en 1937 y desde el año siguiente completamente en Portugal, desde donde garantizó como Embajador el apoyo del gobierno de António de Oliveira Salazar al bando sublevado, así como de suministros materiales y colaboración para la detención de republicanos que traspasaban la frontera.
La misión de Nicolás Franco en Lisboa tuvo por objetivo, primero, asegurar la larga frontera de 800 kilómetros en un momento en que la España nacional estaba sometida a diversas debilidades y problemas limítrofes. Más tarde, al hermano mayor de Franco se le encomendaría la difícil misión de neutralizar la oposición democrática organizada en torno a don Juan de Borbón, conde de Barcelona, cuando el hijo de Alfonso XIII se instalara. en el exilio portugués al término de la segunda guerra mundial.
Nicolás Franco informaría por entonces puntualmente al Generalísimo de los movimientos en torno al jefe de la Casa Real Española. Entre los años 45 y 50, Lisboa sería el centro de una serie de operaciones diversas en las que ,participarían directamente políticos de la derecha y la izquierda como José María Gil Robles, Indalecio Prieto, Pedro Sainz Rodríguez o Francisco Cambó para ofrecer la alternativa de una monarquía democrática tras la derrota de los fascismos. Los embajadores de Estados Unidos y de Inglaterra no serían ajenos a aquel conjunto de acciones diplomáticas en las que participaba -como se ha podido saber después- una parte relevante del generalato español, vinculado con Franco a la guerra civil, como los generales Aránda, García Valiño, Orgaz y Bautista Sánchez, principalmente. A lo largo de aquella etapa decisiva, la acción del embajador de Franco en Lisboa rendiría excepcionales servicios de información y control. Al comienzo de los años 50 la estrategia global aconsejaría a Estados Unidos el apoyo abierto a la dictadura de Franco y la tensión entre Lisboa y Madrid disminuyó visiblemente.
Posguerra
En 1940 fue nombrado Caballero de la Orden Militar y Hospitalaria de San Lázaro de Jerusalén en el grado de Gran Cruz. Ascendido en 1942 a General del Cuerpo de Ingenieros Navales de la Armada, y se mantuvo como Embajador de España en Portugal hasta 1957.
A su regreso a España desarrolló una intensa actividad financiera. Fue fundador y Presidente del Consejo
de la sociedad “Fabricación de Automóviles, SA” (FASA-Renault) y también fundador de “Fabricación de Automóviles Diesel, SA” (Fadisa), así como presidente honorario de Alcan Aluminio Ibérico y consejero de la Compañía Trasmediterránea de Navegación, así como director de Unión Naval de Levante. Fue igualmente consejero de Manufacturas Metálicas Madrileñas. Su hermano Francisco, ya como Jefe de Estado, lo designó Procurador en Cortes, cargo que desempeñó durante las legislaturas VI, VII, VIII, IX y X; hasta su fallecimiento, en 1977.
Fallecimiento
A las cuatro de la tarde del 15 de abril de 1977 fallecía en la Policlínica Naval de Madrid, víctima de complicaciones renales (insuficiencia y uremia aguda) surgidas tras una operación a la que fue sometido el 2 de marzo de ese mismo año a causa de una fractura de cadera.
Los restos mortales estuvieron expuestos durante la noche del viernes y la mañana del sábado en una capilla ardiente instalada en el propio Hospital Policlínico de la Marina. Después de una misa corpore insepulto, celebrada en la capilla del centro médico, fue trasladado, a las cuatro y media de la tarde, al cementerio madrileño de la Almudena donde fue enterrado poco después de las cinco de la tarde. Durante el traslado de los restos, la comitiva fue custodiada por la Policía Municipal y la Policía Armada. Al sepelio asistieron solamente la viuda, Isabel Pascual de Pobil; su hijo, Nicolás Franco Pascual de Pobil, y algunos familiares más, además de un grupo de altos oficiales de la Armada.
Juan Ensenat, primer hermano masón de Mallorca, en unas declaraciones concedidas al diario Baleares, una vez que la masonería española fue legalizada, ha manifestado que “Nicolás y Ramón Franco, hermanos del anterior jefe del Estado español, fueron masones, siendo Pedro González Ruiz el que inició en la orden a Nicolás Franco”