Dio comienzo la plantación que financiada por el Ayuntamiento de Neda dará lugar a la creación de un área recreativa en el monte de Ancos, en una propiedad municipal de algo más de cuatro hectáreas. En esta primera intervención, se plantarán un total de 120 castaños sobre una superficie de 10.000 metros cuadrados (una hectárea). El proyecto se completará con otras tres actuaciones más, una por año, hasta finalizar en el 2020 con la repoblación de la totalidad de las hectáreas.
Todos los árboles guardarán una distancia de diez por diez metros, ya que se trata de hacer de la zona
un nuevo lugar de recreo y ocio para el vecindario y también cará a las personas que gustan de la naturaleza o que quieran pasar una jornada al aire libre.
Las plantas de castaño fueron suministradas por la empresa Viveros Moreira, de Sillobre, y esta
primera plantación podría quedar finalizada en los próximos días, dependiendo de la meteorología.
Previamente, el Ayuntamiento ya había acondicionado un terreno, en su día plantado de eucaliptos,
cuyo suelo mejoró con la aportacións de abonos y fertilizantes.
El alcalde, Ángel Alvariño Saavedra, considera que este tipo de actuaciones son las que “contribuyen
a la conservación del hábitat local y autonómico, además de prevenir a las llamas”.
El Ayuntamiento de Neda estima en 4.000 euros el dinero invertido tanto en la compra de los árboles como en la limpieza y acondicionamiento de las cuatro hectáreas en las que crecerán castaños.