Tras dos años, el gobierno local no ha pasado la prueba del algodón

Este martes y trece se cumplen dos años de gobierno del alcalde, Jorge Suárez. El trece de junio de 2015 Jorge Suárez (Ferrol en Común) fue investido nuevo alcalde de Ferrol con 13 votos —de los seis ediles de su coalición, cinco del PSOE y dos del BNG.

Ferrol en Común es un tripartito formado por Esquerda Unida, Anova y un miembro de Podemos a título individual. Un grupo al que apoyaron, como digo, los socialistas (una primera tenencia de alcaldía podía dar poder) y los dos ediles del BNG en ese juego del «si, pero».

Y en dos años…pasó lo que pasó.

Pero lo malo de todo esto es que la Historia permanece escrita en los medios y lo dicho en ocasiones queda reflejado. Por ello nada mejor que recordar algunas palabras dichas en la sesión de investidura, tras la entrega del bastón de mando.

«Comienza un nuevo tiempo en Ferrol tras los resultados electorales del pasado 24 de mayo para lograr revertir la resignación y la frustración y que las personas encuentren soluciones desde el ámbito político».

«Nos enfrentaremos con valentía a esos grandes monstruos que devoran nuestros recursos públicos y que ya están planeando sobre nuestros astilleros».»Si hace falta apelando la insumisión», avisó en eferencia a los grandes grupos sobre los que recaen varios de los servicios privatizados desde la administración local, como recogida de basura, suministro de agua o mantenimiento eléctrico, en el caso de esta ciudad.

«Corren nuevo tiempos donde la ciudadanía no se resiente solo a depositar su voto en una urna cada cuatro años», pues ahora lo que se demanda es «ser uno más entre todos, en un ayuntamiento que abra puertas y ventanas, con acceso libre y paredes de cristal». Todo ello para «priorizar el gasto en aquello en lo que más se necesita».

«Es tiempo de poner soluciones a los problemas». «La puerta de este alcalde siempre estará abierta para escuchar lo que la gente tiene que decir y para empatizar en la angustia y en la pobreza». Así, la austeridad: «Estará centrada en nosotros mismos y no en la sanidad, educación o vivienda».

«E agora máis que nunca precisamos da unión, da unión social e da falta de revanchismo político, precisamos responsabilidade e altura de miras para non darlles as costas as problemáticas reais da nosa cidade».

Y a lo largo de estos dos años se pronunciaron frases y frases que de momento han quedado en el olvido o se habló de proyectos, palabras, que nunca se han visto materializados.

Mientras…dos años sin presupuestos municipales, gobernando con los del Partido Popular. Siempre se dijo que la prueba del algodón de una corporación municipal era la de presentar a tiempos los «orzamentos», pues bien esa prueba no se ha pasado tras numerosas veces en las que se nos dijo a los medios de comunicación «para que lo publicásemos y asi se acallaban rumores» que muy pronto se llevarían a pleno. ¡Y ya van dos años, repito!.

Por eso, a pesar de los anuncios positivos de la concesión de apoyos a proyectos, por parte de las administraciones central, autonómica y provincial, de momento es muy diícil calificar con un aprobado la gestión del gobierno local.

No vamos a citar los desencuentros, los trapos sucios, las frases hirientes, los insultos,y demás que se han ofrecido en los distintos plenos. Ni la ruptura del gobierno local. Ni incluso lo mal que se llevan unos ediles con otros dentro del grupo de gobierno, cosa bien sabida pero que parece no aflora por temor a ciertas desavenencias .

En fin…que dicho está, el gobierno no ha pasado la prueba del algodón y esperemos que en los dos años próximos tengan tiempo a hacernos variar de opinión.
Desde Ultramar.
Pedro Sanz-Director