La embajadora de Australia en España, Virginia Greville, ha destacado en la mañana de este martes que su país considera a los astilleros públicos de Navantia una empresa «muy importante» y ha sostenido que las relaciones con España incluyen una parte relevante del comercio de Defensa en el que Navantia «es lo más importante».
En declaraciones a los periodistas antes de participar en la inauguración de la II Expo Australia Galicia, organizada conjuntamente con la Australia Spain Business Association en la Universidad de A Coruña, la embajadora se ha referido a la construcción de dos nuevos buques de aprovisionamiento de combate para su país.
En este «largo» proceso, Navantia fue elegida la semana pasada como licitador preferente, ha aclarado, lo que «es muy importante» para el astillero pero «no es la decisión final».
«Es una buena noticia para Navantia, una buena noticia para nosotros porque yo soy una fanática de Navantia, pero es importante hablar en el contexto del proceso», ha abundado.
La embajadora no ha podido concretar los plazos que maneja su Gobierno para adjudicar el contrato de los barcos por importe de «muchos» millones de euros, pero ha confiado en que se produzca «en varios meses», una fecha en la que podrían incidir los tiempos de las elecciones australianas.
Virginia Greville ha enfatizado que Navantia es «una empresa muy importante en Australia por la historia de los barcos construidos en Ferrol»y en estos momentos en el país austral «la experiencia y conocimiento de Navantia es muy importante» a su vez.
«Las relaciones entre Australia y España incluyen una parte muy importante de los comercios de Defensa y Navantia es lo más importante en este contexto» ha terminado.
REUNIÓN CON EL PRESIDENTE FEIJÓO
Durante una reunión mantenida esta mañana -a la que también asistió el conselleiro de Economía, Empleo e Industria, Francisco Conde-, Feijóo constató que actualmente están pendientes de cerrar los plazos y el contrato de la construcción de dos BAC (buques de aprovisionamiento en combate), que supondrá tres millones de horas de trabajo (1,5 millones de euros por cada barco).
Asimismo, hay que destacar que uno de los aspectos más importantes de este contrato es que la construcción se llevaría a cabo en el astillero de origen; es decir, de resultar ganadora Navantia, el proyecto se ejecutaría en Navantia Ferrol.