El concejal de Economía, Hacienda y Patrimonio del Ayuntamiento de Ferrol, Alejandro Langtry Caínzos, dio cuenta en la mañana de este martes, día 9, del borrador de estudio que recoge la información del censo del barrio de Recimil elaborado por el departamento municipal que dirige, así como diferentes propuestas abiertas para darle prioridad a la normalización de la situación de los residentes históricos en esta barriada. El edil ferrolano presentó este documento en la comisión informativa del Área «para dar solución al presente y futuro del barrio a través del consenso de todos los grupos municipales, de ahí que trate de una propuesta abierta para la la cual pido las aportaciones del resto de partidos», dijo.
El estudio de Patrimonio recoge un total de 913 viviendas censadas en Recimil. De esta cifra total de inmuebles, 475 pertenecen a residentes con contrato en vigor y en 179 habitan los residentes históricos -aquellas personas que vivieron toda la vida en Recimil y/o son familiares de personas con contrato-. Asimismo, el censo registra 120 viviendas con inquilinos en situación irregular y otros 139 inmuebles con contrato pero sin uso por parte de su titular.
Así las cosas, la propuesta que trasladó a la oposición el edil de Economía pasa por regular -de manera prioritaria- la situación de los residentes históricos. Este grupo de vecinos tendrán que acreditar, en su momento, no tener otra vivienda en Ferrol ni en propiedad ni en alquiler, no tener demandas por mala convivencia con vecinos, y realizar la presentación de documentos como el DNI o el Libro de Familia, entre otros. El estudio elaborado por el Área de Patrimonio propone que los residentes en estas viviendas accedan al alquiler de las mismas. En este sentido, y aplicando las bonificaciones correspondientes a cada situación particular, el precio del alquiler oscilaría entre un máximo de 112,50 euros mensuales -en el caso de ingresos superiores a 1.331,28 euros al mes- hasta los 28,13 euros al mes que pagarían por el alquiler personas o unidades familiares con ingresos inferiores a 532,51 euros. En cualquier caso, Langtry Caínzos avanzó que la actualización de las rentas antiguas será la última fase dentro de la propuesta de normalización. En este senso destacó que se aplicarán medidas flexibles que tendrán en cuenta los ingresos de cada residente.
En lo que atañe a los 160 inmuebles con contrato en vigor pero sin uso por su titular -139 viviendas y 21 locales-, Langtry Caínzos explicó que «hay que hacer un estudio de cada caso para ver si pueden o deben recuperar y poner de nuevo en el mercado para su aprovechamiento».
Por último, el edil de Economía explicó que para llevar a cabo este programa se deberá trabajar de manera coordinada con la entidad vecinal. Además, abogó por la creación de una comisión para supervisar el proceso en que tendrán presencia diferentes departamentos municipales -Patrimonio, Bienestar, Obras- y también la Asociación de Vecinos.