El conselleiro de Economía e Industria, Francisco Conde, reseñó en la mañana de este lunes, día 5, que el nuevo HUB de Gas Natural Licuado de Reganosa hará de Ferrol el centro de distribución energética del noroeste. Conde asistió a la presentación del proyecto para implantar en Reganosa esta infraestructura, que permitirá suministrar el GNL como combustible a barcos impulsados por gas.
En la presentación junto con Francisco Conde se encontraban la conselleira de Hacienda, Elena Muñoz; el almirante del Arsenal, vicealmirante Manuel Garat , el presidente de la Autoridad Portuaria Ferrol-San Cibrao, José Manuel Vilariño asi como socios de Reganosa, y representaciones de Navantia, Inega, de la universidad de Santiago de Compostela y del mundo empresarial.
EL PROYECTO HUB DE GNL
El proyecto está integrado en la iniciativa europea TIENE-T, que busca promover la innovación y las nuevas tecnologías para las infraestructuras que contribuyan a la descarbonización del transporte, y resulta de una alianza entre la propia Reganosa, la Xunta a través del Inega, Navantia, la Universidad de Santiago y la Autoridad Portuaria de Ferrol.
«El potencial de este proyecto es especialmente grande para el puerto de Ferrol», dijo Francisco Conde, que resaltó que la dársena puede ver multiplicado su tráfico: se encuentra en un punto geográficamente estratégico -el corredor de Fisterra- por donde pasan 55.000 buques al año, y va a ser uno de los pocos puntos de reabastecimiento de GNL en la ruta hacia Europa del Norte. Y Ferrol, destacó al conselleiro, podría buscar aliados entre esos pocos puntos de la fachada atlántica, ofertando servicios conjuntos con puertos de Portugal.
«Significará además una gran oportunidad para nuestros astilleros, en ámbitos como la construcción de nuevos buques que utilicen este combustible, la reconversión de embarcaciones ya construidas, y su reparación», reseñó al conselleiro. Tres ámbitos en los que la demanda europea será cada vez mayor, debido a la directiva europea que limita considerablemente el azufre en el combustible de los buques a partir del 2020, abriendo el mercado para combustibles más limpios como el GNL.
Esa normativa impulsará el GNL como combustible clave en la descarbonización del transporte marítimo, e incrementará el trabajo de los astilleros preparados para construir y reparar buques de este tipo.
De ahí la importancia del trabajo conjunto de astilleros como Navantia y la propia Reganosa, señaló Conde, que puede dar frutos tanto en el suministro de combustible a través del HUB como como en el terreno de los propios gaseros que transportan GNL por todo el mundo.
En este sentido, el conselleiro destacó que la alianza permitirá cerrar los círculos virtuosos de Reganosa, su puerto, y Navantia: en un principio los gaseros llegan a Reganosa para descargar, se reparan en Navantia, y vuelven a cargar en Reganosa antes de partir. En el segundo, los buques pueden repostar GNL, descargar mercancía y ser reparados en la ría de Ferrol. Y ambos, en paralelo, mejoran el conocimiento y la competitividad de los astilleros gallegos para construir más buques de este tipo. Estas ventajas, destacó Conde, aumentarán la competitividad de Galicia.
RÍES 3
«Estamos convencidos de que la ría de Ferrol y su tejido industrial -desde la propia Navantia hasta el puerto- se colocarán en el grupo de cabeza de este nuevo sector», dijo Conde, que ligó esa competitividad a la oportunidad que supondrá para la industria gallega la Estrategia de Especialización Inteligente, RIS3. Un documento con el que Galicia, respaldada por la Unión Europea, guiará la movilización de 1.600 millones de euros en inversiones innovadoras hasta 2020.
«Uno de los focos de inversión será la financiación de proyectos innovadores de sistemas de combustible de Gas Natural Licuado en buques, otorgando ventajas competitivas «a nuestros astilleros» «para conseguir contratos de construcción de este tipo de buques», resaltó Conde, que apuntó la oportunidad que para Reganosa y para Galicia puede suponer la decisión de muchos países del este de Europa de buscar alternativas a la dependencia energética que tienen de Rusia.