El partido jugado en la tarde de este domingo, día 20, en A Malata era a vida o muerte del Real Oviedo contra un rival directo , el Racing de Ferrol y que finalizó con la victoria de los ovetenses por 0-1.
Muestra de esa importancia fue la alegría desbordada de técnicos y jugadores ovetenses a la finalización del encuentro, con abrazos entre todos ellos tras la victoria gracias a un gol “de penalti”.
El encuentro en sí fue muy serio por parte del Real Oviedo. Con una fuerte presión en campo contrario dificultó la salida de balón de los ferrolanos que precisamente se caracterizan por su buen trato de balón.
De esta forma, se pudo ver en A Malata mucho respeto entre ambos equipos, con un Real Oviedo que parecía estar más cómodo que los locales pero que en ningún caso llevó peligro a la meta rival.
El resumen de las ocasiones de ambos conjuntos es más bien corto.
El Racing de Ferrol tuvo un uno contra uno en la primera parte que detuvo Pol y un disparo de Pablo Rey al larguero, en la segunda.
Por parte de los asturianos, el tanto de penalti de Susaeta en el minuto 68 fue el primer y único disparo con peligro entre los tres palos de todo el partido.
El penalti fue claro. Sergio García se adelantó al defensor dentro del área y este le dio una patada al no encontrar el balón que derribó al delantero zamorano del Real Oviedo.
Dado el cariz del partido, estaba claro que el equipo que se adelantara se llevaría la victoria, y así fue. El Real Oviedo se encerró atrás para defender el resultado pero apenas pasó apuros ante un Racing romo en ataque.
Victoria final y tres puntos fundamentales para el Oviedo y una bajada de puestos en la clasificación para los racinguistas.
Alineaciones
Racing.– Mackay, Rubén Comesaña, Pumar, Pérez, Antonio, Iván Forte, Marcos Álvarez, Dani Rodríguez, Diego Vela, Pablo Rey y Manu Barreiro. Banquillo: Kike (p.s.), Víctor Vázquez, Iosu Villar, Dopico y Jorge Rodríguez.
Real Oviedo.– Pol, Álvaro, Sergio Rodríguez, Pardo, David Fernández, Jon Erice, Susaeta, Héctor Simón, Josep Señe, Sergio García y Annunziata. Banquillo: Iván Rubio, Marcos (p.s.), Salva Rivas, Lucas y Diego Cerveró.
A pesar del resultado negativo del partido de este domingo, día 20, Aira sigue confiando plenamente en las opciones del equipo: «sigo siendo tremendamente optimista. Seguimos teniendo una situación muy favorable aunque cada vez es más complicado puntuar.»
El entrenador racinguista reconoció que al equipo le faltó tranquilidad en ciertos momentos «en los últimos minutos atacamos más con el corazón que con la cabeza. Es difícil para estos jugadores, que vienen de tercera, llevar esta situación.» Sobre el encuentro comentó que «lo más justo hubiera sido un empate a cero.»
Por su parte, el técnico del Real Oviedo se mostró feliz por la victoria «estoy muy orgulloso de mis jugadores porque ganar siempre es importante pero, si aún encima, ganas a un rival de esta categoría es mucho más valioso.»