Carlos Barcón, pintor- LA OTRA ORILLA
Posiblemente cuando se escriba la historia del municipio ferrolano, cosa dudosa, pues desde hace muchos años hemos dejado de tener Cronista Oficial… el folklore popular y las canciones actuales, algunas de moda y otras del ayer, formarán parte de esa historia aún sin escribir, como bien digo.
Me habían dicho que el Municipio, entre otras cosas, era escuela de ciudadanía, célula política municipal de la sociedad, ocasión de participar en el gobierno de las cosas, en fin, algo serio e importante. Seguramente quien opinaba así o así lo creyó, andaba un poco equivocado. Porque la realidad municipal es otra, distante del ejercicio político, próximo más bien a una especie de gerencia para diversiones, recreo y ocio, que para más inri, suelen encargar a otros, previo el abono correspondiente, claro.
Uno que ya peina canas, desde hace años sabía de aquellas fiestas que solían organizar diferentes comisiones formadas por vecinos de la ciudad con el apoyo municipal. Gente dispar, con ciertos conocimientos, que sin cobrar un chavo, llegaban a hacer unas fiestas dignas, entretenidas, para todos los públicos, incluidos los forasteros, y la cuantía económica era relativamente muy baja.
Hoy, en tiempos de crisis económica, que nos agobia, se habla de un presupuesto de 210.00,00 euros, que son 35 millones de las antiguas pesetas… y todo su programa nos lo explicaron en unos mal presentados coloristas folletos, más parecidos a una publicidad comercial que a otra cosa, y en una especie de periódico cutre, en un tratar de ¡Vive Ferrol!.
Un Ferrol deteriorado en todos los ámbitos, que según algunos me cuentan, algunos, llega a la organización de estas fiestas y que han sido como un campo de batalla municipal lleno de problemas, en el planteamiento de los festejos de verano, y que el ruido de la pólvora, en esta u otras ocasiones, hace las veces de artillería pesada. No lo sé.
Pero si sé de aquellas lejanas organizaciones de fiestas de antaño, que no solamente llevaban adelante una muy reducida comisión de vecinos, presidida por el edil de festejos, que incluso se atrevían a ofrecer una atractiva revista que quedaría para la posteridad.
¿Qué ferrolano no tiene en su poder alguna de estas publicaciones/recuerdo de un otro Ferrol..?. Si miramos la del año 1975, por citar un ejemplo, veremos una comisión de festejos formada por el periodista y edil Pedro Sanz, en calidad de presidente, José Cagiao Jareal, Antonio Jurado Copado, Enrique Freire Martínez, José Ramón Rey Dopico y Juan J Ruiz González.
Ellos fueron capaces de presentar un vistoso programa artístico/musical/cultural y editar una magnifica revista/programa de fiestas, donde no faltó una jugosa entrevista a su alcalde, en aquél entonces, Joaquín González-Llanos Galvache, y textos, entre otros, de Alvaro Paradela, Manuel N. Mille, el P. Carlos Polo, Luis Otaduy, Carlos Barcón, Maruxa Orjales, Carlos P. Perille, Manolo Couce, José M,. Vilamor,Paco Cobas, Carlos P. Perille, etc. etc. contando en su amplio y variado programa con temas sobre el pregón, coronación de la Reina de las Fiestas, desfile de carrozas y batalla de flores, intervención de bandas de música, grupos de Majorettes, folklóricos, batalla de flores, diferentes verbenas, semana del cine, teatro de guiñol, concurso de Danzas, actuación del show del famoso Raphael, actuación del ballet ruso de la Republica de Georgia, concurso de perros, actuación del Real Coro “ Toxos e Froles”, actuacion del shouman Fernando Esteso, Orquesta “Los Duendes”, tradicional verbena del Mantón, prueba de Motocrosds,, animada batalla naval en el Puerto, espectáculo musical Godspell, concurso de masas corales, presentación de la Compañía Dramática Española de “El sueño de la razón”, actuación de la Compañia Lirica Española, con la zarzuela “Los Gavilanes”, de Guerrero, y “Molinos de Viento” y Bohemios” así como, entre otras muchas cosas más, para no alargarme, de la actuación de Paquita Rico, Torrebruno, orquestas “Los Tamara”, “Los Almirantes”, “Cuarta Calle”,… conciertos en los Cantones y por supuesto la tradicional quema de fuegos artificiales, en la propia Plaza de Amboage.
Tampoco se olvidaban del fútbol femenino, del fútbol modesto, pesca submarina, y de verbenas en los distintos barrios de la ciudad, Canido, Caranza, Inferniño, Cantones…y hasta en esas fiestas se celebró el acto de hermanamiento con la ciudad de Cádiz.
¡Qué tiempos aquellos!. ¡Y pensar que el concello todavía no se ha decidido por conectar con personas que saben de fiestas, de organización y de cómo dejar muy alto el pabellón ferrolano!