El Juzgado de Instrucción Número 2 de Ferrol ha incoado sumario contra tres ginecólogas por supuesta comisión de delito con resultado de lesiones graves en un parto de gemelos en 2006 en el hospital público Arquitecto Marcide, en el que uno de los niños sufrió «graves daños cerebrales» y una minusvalía que lo invalida tanto física como psíquicamente.
La Asociación el Defensor del Paciente ha hecho público el auto del juez, contra el que cabe recurso, que determina que se continúe con la tramitación del procedimiento y se transforme en sumario.
Los hechos tuvieron lugar en sábado en septiembre de 2006. Tras nacer el primero de los bebés, durante el parto, que estaba monitorizado, se detectó sufrimiento fetal agudo y constante, pero pese a esto, no se realizó la extracción inmediata.
Según ha explicado a Europa Press el abogado de la familia y de la Asociación de Defensor del Paciente, Cipriano Castreje, «se esperó demasiado» tiempo y se dejó de monitorizar el segundo gemelo.
El parto estuvo atendido por tres ginecólogas, pero una de ellas, con carácter de MIR, fue la que «llevó el peso del parto», según ha comentado.
«Ninguna prueba complementaria»
El informe pericial, según fuentes de la defensa, «no encuentra otro origen a los daños del menor que no sea intraparto», puesto que los fetos habían evolucionado correctamente. Sin embargo, pese a «detectarse sufrimiento fetal», señala Castreje, «no se hizo ninguna prueba complementaria» y «el niño nació con graves daños cerebrales y una minusvalía que le impide valerse por sí mismo para toda la vida«.
El informe pericial concluye que «las lesiones que padece el segundo gemelo son altamente invalidantes tanto físicas como psíquicas, permanentes en el tiempo, e irán incrementando el grado de minusvalía en el tiempo, a medida que se requieran funciones físicas y psíquicas mayores y más complejas, y requerirá de la competencia de terceras personas para su atención y cuidado«. Se concluye que se verá «privado de una vida digna y libre a la que toda persona tiene derecho».
El Ministerio Fiscal solicitó este 2013 el sobreseimiento libre y el archivo de las actuaciones al entender que el posible delito habría prescrito, al haber transcurrido más de cinco años. Sin embargo, el abogado del Defensor del Paciente ha puesto de manifiesto la existencia de retrasos ajenos a la familia.
Así, tras la presentación de la denuncia ante el juzgado de guardia el 22 de febrero de 2007 por entender que se había producido una mala praxis, y la incoación de diligencias penales por auto el 30 de marzo de ese mismo año, el Hospital Arquitecto Marcide no remitió al juzgado las historias clínicas solicitadas hasta tres meses después, y de forma incompleta. No fueron completadas hasta dos años después, según señalan las mismas fuentes judiciales. Además, el informe forense realizado por parte del Imelga no fue emitido hasta junio del 2012.
Delito doloso de lesiones graves
El juez ha determinado en su auto que el instructor no puede cerrar en falso el procedimiento haciendo una serie de valoraciones que no le corresponden ni calificar jurídicamente los hechos.
No obstante, puntualiza que no se está en condiciones de afirmar que se haya cometido un delito doloso de lesiones graves, pero «tampoco en condiciones de descartarlo rotundamente«, por lo que considera oportuno para garantizar la tutela judicial efectiva el permitir a las partes el acceso a fase de plenario.
La pena aplicable a estos hechos, de delito doloso eventual de lesiones graves, es de prisión de seis a doce años.
«Nadie ha pedido disculpas a la familia»
Cipriano Castreje ha señalado, en declaraciones a Europa Press, que «esto se hubiera podido evitar si a la familia se le hubiese hecho una oferta razonable para compensar el daño, aunque no tenga precio».
Así, ha lamentado que «les obliguen a este largo sufrimiento judicial» y ha censurado que «nadie, absolutamente nadie, les ha ya pedido disculpas».