El comité de Sogarisa defiende que la planta de As Somozas reúne los requisitos de protección ambiental «vigentes».
La Xunta mantiene la suspensión cautelar de parte de la actividad en el centro de tratamiento de residuos industriales de Galicia, ubicado en As Somozas, tras recibir en la jornada del jueves varios avisos de centros sanitarios de la comarca advirtiendo de la existencia de pacientes que referían diferente sintomatología de carácter leve como dolores de cabeza y molestias oculares.
Este viernes, la Consellería de Medio Ambiente ha confirmado que un inspector de la Dirección Xeral de Calidade Ambiental e Sostibilidade visitó las instalaciones para certificar que la actividad estaba paralizada en la parte del centro afectada, constatando que es así.
La suspensión de las operaciones afecta, en concreto, a la planta de evaporación y oxidación térmica, sobre la que el servicio de intervención ambiental está recopilando, han apuntado, toda la información necesaria en el marco de la investigación abierta con el fin de resolver el expediente.
A mayores, se solicitó a la Sociedade Galega de Residuos Industriais (Sogarisa), gestora de la instalación, una serie de datos e información sobre la actividad de este centro y, en paralelo, la Dirección Xeral de Calidade Ambiental e Cambio Climático está realizando en la zona distintas mediciones sobre la calidad del aire.
Con todas las muestras y evidencias recopiladas y, en función del resultado de las inspecciones y de la propia investigación sobre el posible origen del foco de intoxicaciones, la Consellería de Medio Ambiente e Cambio Climático adoptará las medidas necesarias en aplicación de la Ley de control y prevención integrados de la contaminación.
El comité de Sogarisa defiende que la planta de As Somozas reúne los requisitos de protección ambiental «vigentes».
El comité de empresa de la Sociedade Galega de Residuos Industrais (Sogarisa), tras la suspensión de una parte de la actividad en el Centro de Tratamiento de Residuos Indusrtriales de Galicia, en As Somozas — después de alertarse de casos de intoxicación en el entorno — ha manifestado que la planta «reúne todos los requisitos de seguridad y protección ambiental vigentes».
«La planta es una infraestructura pública que la Xunta pone a disposición del concesionario para su explotación, si la planta es la misma, los trabajadores que la operan también y no hay incumplimientos en la Autorización Ambiental Integrada por parte de la empresa».
«Los profesionales que desarrollamos aquí nuestro trabajo todos los días, somos los primeros interesados en que la empresa cumpla todas las garantías, aquí se tratan residuos industriales, de no existir una planta de este tipo, la amenaza para el medio ambiente sería muy grande«, exponen en un comunicado.
«Defendemos tres cosas fundamentales: nuestro puesto de trabajo, nuestra seguridad y nuestra salud, de haber motivo de alarma seríamos los primeros en denunciarlo, no hay ninguna constancia de trabajadores ni de Sogarisa, ni de ninguna subcontrata o profesional del transporte que estuvo estos días en la planta que hubieran sido atendidos por servicios médicos por este motivo«, recalcan.