La Guardia Civil investiga a dos personas, de 58 y 61 años, vecinos del municipio coruñés de Cedeira como presuntos autores de un delito de marisqueo ilegal.
Según ha informado el Instituto Armado en un comunicado, a una de las personas investigadas le imputan un delito de desobediencia grave.
De esta forma, las diligencias policiales fueron remitidas al Juzgado de Primera Instancia número uno de Viveiro, en Lugo.
Al parecer la Guardia Civil sorprendió «in fraganti» a los dos furtivos de Cedeira extrayendo percebes en un paraje escarpado de la costa de Ribadeo. Trataron de huir, pero los agentes los interceptaron a los pocos metros. Están acusados de «hechos delictivos, la captura y extracción ilegal de 37 kilos de percebes». Los tenían en su poder cuando los guardias los pillaron, al igual que los trajes de neopreno y otros utensilios que emplearon para llevarse ilegalmente el marisco.
Los furtivos estaban «en un paraje escarpado conocido como Punta Gallin». De los 37 kilos de percebe, 8 eran de talla inferior a la legal.
La Guardia Civil de Lugo destaca que el operativo «logra abortar la puesta en circuitos comerciales del marisco ilegal, con el consiguiente riesgo para la salud pública, al no pasar los controles sanitarios pertinentes antes de su venta». Agrega que al interceptar a los dos furtivos de Cedeira también mitiga «las consiguientes pérdidas económicas para los profesionales del sector marisquero de la zona dedicados en exclusiva al percebe».