La unidad de medio ambiente de la Policía Local, puesta en marcha a comienzos de año en fase inicial como respuesta a una demanda histórica de los vecinos del rural, desarrolló más de 600 intervenciones en lo que va de año, la mayoría (192) relacionadas con fincas abandonadas, tal y como detalló esta mañana el concejal de Seguridad de Tráfico, Germán Costoya. Gran parte del trabajo de esta patrulla es “atender las reclamaciones vecinales sobre parcelas sin mantenimiento continuo, lo que puede suponer un riesgo para los residentes próximos”, indicó. El edil destacó que en lo que va de año “esta unidad realizó un gran trabajo, lo que pone de manifiesto que se trata de una iniciativa muy necesaria”.
Cerca de 80 intervenciones corresponden a informes y notificaciones medioambientales y otras 80 relacionadas con animales. En cuanto al proceso de gestión de residuos y vertidos en el municipio, la unidad medioambiental de la Policía Local intervino en 40 ocasiones desde su puesta en marcha y desarrolló 20 informes relacionados con el área de Urbanismo.
En cuanto al control de ruidos, la unidad redactó 16 informes y 13 en materia de señalización de tráfico, al igual que notificaciones del área de Estadística. También emitió 9 sobre seguridad y tráfico, otros 9 de obras, 7 por vehículos abandonados y otros 7 por altercados, 6 por desprendimientos, ejecutó 6 atenciones de auxilio ciudadano, 6 cierres de tráfico, 6 atenciones por obras sin licencia, 6 por obras y licencias de obras, 6 colaboraciones con juzgados, 5 intervenciones por gestión de talas, 4 por quemas y 3 por inundaciones y daños por agua, entre otras tantas. El edil recordó que esta patrulla, acompañada de un oficial, recorre las parroquias de la zona rural con un vehículo todoterreno. Es siempre la misma unidad “precisamente para que conozcan a los vecinos sus inquietudes en materia medioambiental”.