Tras la firma del convenio el Racing deja de ser un inquilino sin contrato en el Estadio de A Malata.
Mateo Pintado
En la mañana de este jueves, día 20, el presidente del Racing, José María Criado, y el alcalde de Ferrol, Ángel Mato, han firmado el convenio para que el Racing pueda usar a coste cero el Estadio de A Malata, seis meses después de que dicho acuerdo fuera aprobado en el pleno del ayuntamiento. Estuvieron acompañados por el edil de Deportes, Antonio Golpe; y el consejero delegado del Racing, Manuel Ansede Sánchez.
“Un parto de nueve años”
Por fin finaliza ese “parto de nueve años” como ha denominado el presidente de la entidad racinguista, después de que el último convenio de este tipo, caducase en el año 2012, 19 años después de que en el año 1993, el alcalde de aquel momento, Manuel Couce, lo firmase junto a Manuel Criado Seselle, presidente del Racing entre los años 1993 y 1995.
El documento firmado este jueves señala que la cesión del campo al club departamental será válido durante los próximos tres años, con la posibilidad de prorrogarse quince años más. Además, las cláusulas administrativas señalan que el club podrá utilizar el terreno de juego, las gradas, las taquillas, el campo anexo y demás dependencias para la celebración de encuentros y entrenamientos, quedando excluidas las demás instalaciones que se encuentran en el interior del centro deportivo como son la piscina municipal, los establecimientos que se encuentran cerca del lago, los kayaks y el rocódromo; mientras en Concello podrá organizar eventos en el estadio siempre y cuando no obstaculicen la competición oficial o actividades programadas por el club.
Obras y Mantenimiento
Una de las partes de mayor interés de la afición del centenario club, es la de las reparaciones de un estadio que está en una situación ruin.
Según señala el acuerdo, los gastos de conservación, reparación, mejoras, reformas, limpieza y seguridad necesarios para el buen uso de las instalaciones irán a cargo de la entidad racinguista; mientras que, las reformas de mayor envergadura, como las que afectan a la estructura del campo, a su estabilidad o a las cubiertas irán a cargo del ayuntamiento.
Además, los gastos para adecuar el estadio a la normativa marcada por los organismos reguladores de las competiciones oficiales para la participación del club, como pueden ser las medidas de seguridad y emergencias, serán pagadas por el Racing.