La ley 20/21, aprobada el 28 de diciembre pasado, «abre para el empleo público la oportunidad de subsanar un insulto sostenido en el tiempo en las administraciones públicas, con especial incidencia en el Concello de Ferrol», afirman desde Ferrol en Común.
Esta ley da la posibilidad de que, por una única vez, «personas que llevan hasta veinte y treinta años trabajando para el Concello puedan tener la oportunidad de quitar el yugo de la incertidumbre y precariedad laboral, al poder estabilizar sus puestos de trabajo, sin verse abocados en cualquier momento a un despido arbitrario por parte del gobierno de turno.«
El Concello de Ferrol tiene una relación de puestos de trabajo «obsoleta» que data del año 2000, «incapaz de renovación por falta de acuerdos políticos, lo que provocó por un lado un déficit estructural de plazas que impiden la prestación correcta de servicios públicos y la materialización de la voluntad política y, por otro lado, una tasa de temporalidad que desborda con mucho las medias nacionales del treinta por ciento. Hay departamentos completos donde la interinaje supera al plantel fijo: bienestar, urbanismo, recursos informáticos o recaudación son claros ejemplos.«
Esta situación no fue propiciada «por las personas que ocupan esas plazas y hacen un trabajo ingente para sacar adelante en condiciones precarias un ayuntamiento con muchísimas dificultades de gestión, ahogado por la tasa de reposición y la crisis demográfica y de recursos«. Esta situación fue propiciada «por las sucesivas corporaciones en su conjunto, incapaces de solventar la situación creada, y ahora, que la ley lo permite, es el momento de subsanar un insulto.«
Ferrol en Común insta al gobierno «a seguir una hoja de ruta determinada y transparente, con fechas concretas para alcanzar hitos, negociada con todos los grupos y, nombradamente, con las organizaciones sindicales, a las que interpela para que en este campo, en beneficio de los trabajadores y trabajadoras a los que representan, actúen con unidad de acción y aparquen sus diferencias, toda vez que esta ventana que se abre tiene fecha de caducidad: la fecha de determinación de plazas afectadas y la oferta de empleo tienen como límite para su aprobación junio de este año, y la publicación de convocatorias y bases, diciembre de 2022. Fuera de esa fecha, la oportunidad cesa y las personas afectadas ven en riesgo su continuidad laboral, con el consiguiente desplome de la gestión de recursos públicos.«
Ferrol en Común siempre consideró «imprescindible» para cualquier avance de ciudad, «un refuerzo del empleo público en todos los centros gestores, que pase, en primer lugar, por combatir la precariedad consolidando el empleo público estructural, acogiéndose la esta oportunidad histórica y, por otro, ampliando el plantel con ofertas de empleo público abiertas, que den ánimo a servicios con alta demanda como los nominados bienestar o urbanismo, que son la primera línea de acción para responder las necesidades ciudadanas. Sin empleo público la voluntad política no tiene más valor que lo de un gesto formal sin contenido tangible.«