La Tarxeta Básica, puesta en marcha por la Xunta hace poco más de un año para atender a las personas más vulnerables frente a los efectos socioeconómicos de la crisis sanitaria de la covid-19, lleva beneficiado a unas 2000 personas en el Concello de Ferrol desde su puesta en marcha. Esto significa que se emitieron casi 1500 tarjetas en las que el Gobierno gallego invirtió cerca de un millón de euros.
El director general de Inclusión Social, Arturo Parrado, visitó el viernes 13 de agosto en A Coruña la sede de la Cruz Roja, encargada de gestionar este cartón, donde comprobó que se están a punto de superar las 40.000 Tarxetas Básicas emitidas. Esta cifra supone que más de 55.000 gallegos se pudieron beneficiar de esta ayuda para adquirir productos básicos de alimentación, higiene y farmacia.
Hace poco más de un año se puso en marcha esta tarjeta monedero, que la Xunta de Galicia acaba de ampliar tras su buena acogida. En el mes de junio el Gobierno gallego aprobó una nueva prórroga de la vigencia de esta Tarjeta hasta finales de 2021 con una inversión adicional de cinco millones de euros. Este incremento permite elevar a 31 millones de euros el total de fondos que la Administración autonómica lleva destinados a esta medida.
Hace falta recordar que el importe de esta ayuda depende del número de miembros de la unidad familiar. En el caso de los hogares unipersonales la ayuda es de 150 euros mensuales, para los hogares con dos miembros es de 200 y para las familias con tres miembros o más la ayuda llega a los 300 euros mensuales.
En concreto, ya se llevan emitidas 39.648 tarjetas. El mayor número de beneficiarios se encuentra en las siete ciudades gallegas. En A Coruña se han emitido más de 5500 tarjetas; en Ourense, más de 3100; en Vigo, 2200; en Lugo, 2100; en Santiago, 2000; en Ferrol cerca de 2000 y en Pontevedra, casi 1200.
Ayuda ágil, que no estigmatiza
Se trata de una actuación pionera que busca dar una respuesta ágil y urgente a las familias, su período máximo de tramitación es de 72 horas desde que se solicita. Su objetivo es prestar apoyo en la compra de productos básicos de alimentación, higiene y farmacia.
Por otro lado, esta tarjeta representa una actuación coordinada al implicar en su gestión a la Xunta, a los servicios sociales municipales y a las entidades sociales como Cruz Roja, encargada de su tramitación.
Además, no estigmatiza ya que al tener forma de tarjeta de crédito que se recarga mes a mes, sus usuarios no tienen que hacer colas ni acudir a un establecimiento específico para obtener los productos.