Carrera dura, con mucha calor y mucha humedad en el circuito olímpico de Tokyo 2020, celebrada en la madrugada española del lunes y donde competía el triatleta ferrolano Javier Gómez Noya.
Javier Gómez Noya se reencontraba con la distancia olímpica con 38 años, tras haber centrado sus esfuerzos en otras carreras de media y larga distancia en los últimos años, intentando quitarse la espina de su ausencia de Río 2016 por lesión cuando era el gran favorito a la medalla de oro.
Las cosas no empezaban bien desde el principio, en un sector de natación muy rápido encabezado por el francés Vicent Luis donde el equipo español, en el que también estaban Mario Mola y Fernando Alarza, salían muy retrasados en la primera transición, a 43 segundos.
En el tramo de ciclismo, los españoles salían en el tercer grupo, recortando distancias con el paso de las vueltas, empezando a 36 segundos de la cabeza de carrera tras la primera pasada por la línea de meta y logrando contactar en la quinta vuelta, a los 49:40 de competición, algo que les suponía mucho esfuerzo en esta persecución. Tras esto, los españoles estuvieron en la zona media y de atrás del pelotón formado por 37 triatletas.
El suizo Salvisberg atacaba en la penúltima vuelta, logrando abrir distancias con el pelotón y llegaba en cabeza en la segunda transición, librándose de una penalización por centímetros al frenar la bicicleta justo a tiempo, logrando aventajar al pelotón en 23 segundos.
Una vez iniciada la carrera a pie, al suizo poco le duraba la ventaja, siendo absorbido por el grupo principal que encabezaba el británico Alex Yee, mientras que los españoles no daban contactado con ellos, quedándose descolgados, perdiendo 22 segundos tras la primera de las cuatro vueltas, con Javier Gómez Noya en el 23º puesto.
Con el paso de los kilómetros Alex Yee veía como no se daba marchado a pesar del gran ritmo que imponía, aunque si se iba haciendo el grupo de cabeza más pequeño, mientras que Mario Mola intentaba remontar posiciones desde atrás, aunque las distancias con Javier Gómez Noya cada vez eran mayores.
Todo se decidiría en la última vuelta, cuando el noruego Kristian Blummenfelt realizaba un cambio de ritmo brutal que lo llevaba en volandas hasta la línea de meta, dándolo todo y consiguiendo la medalla de oro con un tiempo de 1:45:04. La plata era para el británico Alex Yee a 11 segundos y el bronce para el neozelandés Hyden Wilde a 20 segundos, mientras que por parte de los españoles, Mario Mola era 10º, Fernando Alarza era 12º y Javier Gómez Noya era 25º a 2:42 del vencedor.