Javier Pereira Beceiro (*)
Retomamos la senda de la labor divulgativa tras unas semanas intensas absorto por el trabajo, tratando otro tema muy interesante, para ponerle cara a un problema de salud que afecta a muchos hombres en el mundo, muchísimos más de los que seguramente imaginamos, y que trasciende no sólo a la esfera de la salud sanitaria, sino que también afecta seriamente a la salud social ya que afecta a las relaciones de pareja. El tema que vamos a tratar es la disfunción eréctil, y como siempre, con un lenguaje cercano y comprensible.
El 52% de los hombres de más de 40 años sufren problemas de erección permanentes
En primer lugar vamos a hablar de números, para que podamos ver la trascendencia de los problemas de erección. Y los trabajos científicos, tanto españoles como mundiales, nos dicen que 1 de cada 5 varones mayores de 18 años presentan este problema, en algún grado de severidad, es decir, el 20% de la población mundial masculina mayor de 18 años sufre problemas de erección, en mayor o menor medida.
Si analizamos los datos por grupos de edad, podemos ver que en el grupo de 40 a 70 años los hombres afectados son algo más de 5 de cada 10. Por tanto, más del 52% de los hombres de más de 40 años en el mundo tienen problemas de erección, lo que supone también un serio problema en las relaciones sociales y de pareja.
El hombre tarda entre 1 y 2 años en consultar sus problemas de erección
Podríamos pensar que bueno, cualquiera puede tener un gatillazo y eso no supone un problema establecido, y es así. Por eso vamos ahora a explicar qué es la disfunción eréctil, y para ello emplearemos una de las definiciones más utilizadas en los últimos 30 años, y que es “la incapacidad permanente para iniciar o mantener una erección suficiente como para permitir una relación sexual satisfactoria”. Como se puede deducir fácilmente, esta definición excluye todos por problemas ocasionales, puntuales o temporales, que van desde un simple gatillazo de una noche tras un consumo excesivo de alcohol, a una temporada más o menos larga de problemas por ansiedad o estrés. Estamos hablando de que más del 50% de la población mundial masculina mayor de 40 años tiene problemas mantenidos en el tiempo en su erección, lo que supone una pérdida de su calidad de vida, y una clara alteración de lo que llamamos la salud biopsicosocial, puesto que se afectan todas las esferas de la persona.
Y aunque siempre defenderé a capa y espada que la sexualidad no es una erección o un coito, tampoco podemos menospreciar este problema, o acotar las relaciones sexuales satisfactorias a una franja de edad. Además, la disfunción eréctil en muchos casos puede ser el primer aviso de otros problemas de salud muy serios, como la diabetes, la hipertensión, la arteriosclerosis o las enfermedades cardíacas. Por desgracia, a pesar de vivir en la época de la comunicación y de los cambios de mentalidad en cuanto al autocuidado, todavía los hombres tardamos entre 1 y 2 años en consultar este problema, y en muchas ocasiones, lo seguimos haciendo desde la soledad y cierto grado de vergüenza, autoengañándonos que nuestras parejas no se han dado cuenta, y sin comprender que sólo desde la pareja podremos entender y estudiar mejor el problema, y buscar la mejor solución.
El mejor profesional aquel que esté totalmente implicado y sensibilizado con este problema
Las causas de este problema pueden ser múltiples, y van desde problemas hormonales , vasculares o neurológicos hasta problemas psicológicos. Lo que me gustaría dejar claro es que no debemos de pensar que es exclusivamente un problema local del pene. Es más, en la mayor parte de las ocasiones no encontramos una causa concreta a la cual podemos darle un tratamiento concreto. Y lo que también quisiera dejar claro es que es fundamental que, al menos, en la primera consulta, acudan juntos la pareja.
Esto nos lleva a una pregunta de no fácil respuesta, y es a qué especialista debo consultar primero. Pues con total sinceridad, como especialista en urología, pero también como especialista en medicina familiar y comunitaria que soy, creo que el profesional más adecuado para una primera consulta debiera de ser nuestro médico de familia, y que, tras un abordaje inicial, nos derive a un urólogo. No obstante, el mejor profesional es aquel que esté totalmente implicado y sensibilizado con este problema, y que no se desentienda dándonos una pastilla azul y punto, ya que este problema exige un estudio pormenorizado que parte desde la atención integral en el seno de la pareja, y que exige una serie de cambios en los hábitos de vida en donde, sin la implicación del profesional, los objetivos se vuelven más difíciles.
Algo más que la pastilla azul
Como vemos, el tratamiento adecuado es algo más que una pastilla azul, y si bien debemos reconocer que fue un avance revolucionario en su momento, para encontrar la mejor solución, debemos personalizar el estudio de cada caso, y así podremos personalizar su tratamiento, que sí o sí pasa por una serie de cambios en el estilo de vida de las personas, y que no puede ser el mismo tratamiento para un hombre de 40 que para uno de 75 años, o para alguien diabético o que está operado de un cáncer de próstata, o a tratamiento con quimioterapia por un cáncer de pulmón. Es más, aunque alguien voluntariamente decida libremente no tener relaciones sexuales, por el bien de su salud, debería consultar si presenta problemas de erección. Tratamientos hay muchos, pero todos parten de la preocupación de quien lo sufre y de la implicación del profesional que lo maneje.
Después de todo lo comentado, podemos deducir fácilmente la importancia y la gran difusión de los problemas de disfunción eréctil, que son bastante más que un problema del pene, y que, sin duda, los problemas en la erección es otro de esos síntomas que no debes dejar pasar por alto.
(*) Médico especialista en Urología y Andrología en Área Sanitaria de Ferrol Médico especialista en Medicina Familiar y Comunitaria Médico especialista en Cirugía Laparoscópica Máster en Suelo Pélvico e Incontinencia urinaria femenina por la Universidad de Salamanca Máster en Cáncer de Próstata Avanzado por Universidad de Salamanca Máster en UroOncología por la Universidad C. Herrera
Creo recordar que en el mayo del 68 hubo una frase que quedó enmarcada como transcendental; la frase fue: «la imaginación al poder». Bueno, pues eso pienso yo que es algo válido para aplicar en los casos de disfunción eréctil cuando la edad (en mi caso) te marca la pauta a seguir. La imaginación es un arma poderosa cuando se utiliza con método y la praxis como sistema.