La tripulación del pesquero ‘Punta Candieira’, el barco apresado por Irlanda por «infracciones» de las normas de pesca, se encuentra «bien» a la espera de la investigación en curso sobre lo sucedido.
En declaraciones del gerente de la organización de productores Puerto de Celeiro SA, Jesús Lourido, explica que la tripulación está conformada por 15 hombres, mayormente de la costa gallega de zonas como Celeiro y Cedeira, y actualmente «tiene libertad de movimientos».
Así, se evalúa si «parte del aparejo, por las corrientes o por lo que fuera, cayó dentro de las 12 millas» territoriales de Irlanda. Lourido espera que haya resultados próximamente, dado que los barcos comunitarios de más de 12 metros tienen sistemas de geolocalización para conocer su posición.
El pesquero ‘Punta Candieira’, perteneciente a la empresa Hermanos García Yáñez, de Cedeira, con puerto base en Celeiro, en el municipio de Viveiro (Lugo), fue apresado por el Servicio Naval de Irlanda, a 95 millas al sur de Mizen Head, por supuestamente faenar dentro de las 12 millas territoriales del país. El buque se mantiene este miércoles en el puerto de Cobh, en el condado de Cork.
Al respecto, fuentes del Gobierno gallego trasladan que han hablado con la embajada española en Irlanda, que se ha puesto en contacto con el Gobierno irlandés para «seguir el caso», de forma que se puedan «clarificar las circunstancias de la retención», así como que se retome su actividad pesquera con normalidad.
LAS COFRADÍAS URGEN LA LIBERACIÓN
Por su parte, el presidente de la Federación Nacional de Cofradías, Basilio Otero, ha apremiado al Gobierno irlandés a que «libere cuanto antes» al pesquero ‘Punta Candieira’.
El también presidente de las cofradías de la provincia de Lugo remarca que este tipo de embarcaciones «van dotadas con una caja azul que hace un seguimiento de su longitud y de su latitud con lo que traslada el posicionamiento exacto», «así que habrá que comprobar si lo que dicen las autoridades irlandesas es cierto o no». «Y que se resuelva cuanto antes para que pueda seguir pescando», urge.
Otero apunta que este apresamiento se debe a que «dicen que estaba faenando en las 12 millas que son jurisdiccionales exclusivas». «Para ello hay una manera fácil de comprobarlo, de ser cierto sería un error o un problema mecánico o de aparejo», expone. «No es habitual que se aproxime ningún barco español a esas aguas«, asegura.