El alcalde de Neda, Ángel Alvariño (PSOE), además de los grupos municipales con representación en este municipio –PSOE, PP, Moveneda y BNG–, han mostrado su apoyo a los delegados de los trabajadores de la empresa Galicia Textil, asentada en este ayuntamiento y cuya dirección ha presentado un expediente de regulación de empleo (ERE) extintivo para 20 de los 36 trabajadores que componen la plantilla.
Ángel Alvariño ha detallado que han acordado hacer una «declaración institucional en defensa de los puestos de trabajo» al entender que «la empresa es viable en estos momentos». «Desde el Ayuntamiento nos vamos a poner en contacto con la dirección de la compañía para pedirles que retomen la situación, para mantener los puestos de trabajo y no ejecutar una deslocalización», ha manifestado.
El regidor socialista ha asegurado que la sociedad «tiene rentabilidad» y que se trata de «una empresa que tiene una gran historia, con más de 200 años fabricando, bien como ahora dentro del sector textil y anteriormente en otros ámbitos».
MEDIACIÓN
Ángel Alvariño también se ha ofrecido a «entablar negociaciones con la empresa para abordar aquellos asuntos que permitan mantener los puestos de trabajo, ya que si se ejecutan estos despidos la perdida sería irreparable para Neda y para la comarca».
La aprobación de dicha declaración institucional está prevista que sea en un pleno que está convocado para el próximo lunes, 25 de enero.
Por su parte, uno de los delegados sindicales, Jesús Pérez (UGT), ha detallado que «por el momento llevan en la mesa de negociación tres reuniones sin alcanzar ningún acuerdo». Así, lamenta que la empresa se cierra en banda y quiera es despedir a los mayores de 55 años, en lo que define como «prejubilaciones».
Con todo, el sindicalista alerta de que ello significaría que estas personas tras dos años en el paro tengan ya 57 años, con unas posibilidades de colocación inexistentes. Por su parte, señala que «para los menores de 55 años ofrece 22 días por año trabajado y para casa», una situación que los delegados sindicales no aceptan.
PROPUESTAS
La propuesta de UGT y CIG, que son los que conforman la mesa de negociación, pasa por «utilizar el dinero que se quieren gastar en las indemnizaciones» en mejorar las condiciones de los asalariados mayores de 55 años, prejubilados hasta los 63 o 64 años.
Por su parte, «piden que ninguno de los menores de 55 años sea despedido, entrando en un ERTE rotativo y que cada cierto tiempo, según lo acordado, la plantilla esté regulada», de forma que todos tengan para comer.
En cuanto a las causas económicas por las que se ha presentado este ERE de extinción, Pérez ha detallado que «estas son difíciles de conocer. «Cuando todo lo que vendes lo haces para un mismo cliente, en este caso Textil Santanderina, que es además nuestro propietario, al grupo al que pertenecemos, por lo que las cuentas son muy fáciles de maquillar, ya que al final a tu dueño le da igual ganar dinero aquí o allí», ha sostenido.
Por último, ha detallado que el próximo lunes está «prevista la cuarta y última reunión de la mesa». En función de los resultados de este encuentro no descartan iniciar movilizaciones.