El alcalde de Ferrol, Ángel Mato, ha transmitido este lunes «las gracias en nombre de la ciudad» a Álvaro Fraga, un joven vecino del barrio de Recimil que en el mediodía del pasado viernes, 25 de diciembre, atrapó en el aire, entre sus brazos, a un niño de 15 meses que se había precipitado desde la ventana de su vivienda a la plaza de Sevilla, en el barrio de Recimil.
‘Pitu’, como cariñosamente le llaman sus conocidos y amigos, estaba con sus perros y, alertado por una vecina, se situó justo debajo de la ventana para frenar la caída del niño desde el primer piso.
El regidor ha recibido en el Ayuntamiento al que algunos ya catalogan como «el héroe de Recimil» en una recepción desarrollada desde las 11,30 horas de este lunes en uno de los salones de la Alcaldía. En el encuentro, Mato ha destacado que «lo que pudo ser un drama, se ha convertido en una noticia feliz» y ha puesto en valor «el comportamiento y la rapidez para evitar una situación que podía haber sido dramática».
COGIDO AL VUELO
Por su parte, Álvaro Fraga se ha mostrado «muy agradecido por este reconocimiento», al mismo tiempo que «abrumado». «Yo hice lo haría cualquier otra persona que se encontrara en ese mismo lugar y en las mismas circunstancias, lo más importante ha sido que hemos tenido un final feliz», ha sentenciado.
El vecino ha destacado que todo sucedió muy rápido. «Cuando estaba paseando a mis tres perros, una vecina comentó que venía muy nerviosa porque acaba de ver a un niño asomado a una ventana», ha explicado.
Fue entonces cuando dirigieron su mirada a la zona y vio «al niño sentado en la repisa». «Nos fuimos al lugar y ya me puse debajo de la ventana, tratando de que el niño no se fijará en mí, mientras otras personas acudieron a llamar a los padres para contarles lo que pasaba», ha narrado.
Cuando Álvaro Fraga se encontraba bajo la ventana, el niño se movió y se precipitó. El vecino lo recibió con los brazos abiertos y lo cogió «al vuelo«. El joven ha explicado que, en un primer momento, el bebé «ni lloró y solo lo hizo transcurrido un tiempo y al darse cuenta de que no me conocía de nada»