La Mancomunidade de Concellos de la Comarca de Ferrol aprobó su presupuesto para el próximo año. En el pleno celebrado esta tarde de manera telemática se dio el visto bueno a unas cuentas que ascienden a 1.041.599,44 euros y que servirán para mantener los principales programas de los que se viene haciendo cargo el organismo supramunicipal, como son, entre otros, la gestión del refugio de animales de Mougá, la gestión de residuos voluminosos o el servicio de atención temprana.
En el capítulo de ingresos del presupuesto se incluyen 24.136 euros procedentes de tasas y precios públicos, 956.153,44 correspondientes a transferencias corrientes, 43.560 a ingresos patrimoniales y 17.750 a transferencias de capital. Los gastos se dividen entre los de personal (264.612,28 euros), los corrientes en bienes y servicios (673.207,28), las transferencias corrientes (86.029,88) y las inversiones reales (17.750).
Tras esta aprobación inicial y su publicación en el Boletín Oficial de la Provincia, el proyecto de presupuesto estará expuesto al público por un período de quince días hábiles. De no haber reclamaciones transcurrido este plazo, se considerará definitivamente aprobado y entrará en vigor una vez que se cumpla el trámite de su publicación definitiva.
La sesión también sirvió para presentar el Plan de Actuación ante Casos o Contactos Covid-19, elaborado desde la Cátedra de Protección Civil y Gestión de Emergencias y la propia Mancomunidade de Concellos de la Comarca de Ferrol. Se trata de un modelo cuyo cometido es servir de base a los ayuntamientos que lo necesiten para disponer de un protocolo actualizado y acomodado a la situación. Esta herramienta debe ser útil para detectar posibles contagios entre el personal municipal, las empresas que prestan servicios para la Administración local y los clubes y entidades usuarias habituales de instalaciones de los ayuntamientos, y así, poder establecer estrategias con las que cortar una posible cadena de transmisiones. Dichas estrategias y las recomendaciones contenidas en el documento parten de las establecidas por las autoridades sanitarias, adaptándolas a las características propias de cada ayuntamiento, pero también de la experiencia adquirida durante el período de elaboración de los planes de contingencia de las instalaciones y actividades municipales que incluían protocolos de actuación en caso de contagio o manifestación de síntomas compatibles con la covid-19.