(EP)-La familia de Carlos Eduardo Juárez, el joven que desapareció en A Coruña el pasado 5 de septiembre, está pendiente de las pruebas de ADN tras ratificarse que las ropas del cuerpo localizado en Cabo Prioriño se corresponden con las que su allegado llevaba ese día.
Así lo han indicado fuentes próximas al caso que han precisado que, hasta el momento, se ha confirmado que las ropas pertenecen a este joven, de 22 años, pero que se está pendiente de la ratificación oficial de la identidad del cuerpo a través de las pruebas de ADN.
La embarcación ‘Salvamar Betelgeuse‘, de Salvamento Marítimo, rescató, sobre las 14,00 horas del martes, el cadáver de un hombre que flotaba a unas dos millas al oeste del Cabo Prioriño, en la entrada de la Ría de Ferrol, en las inmediaciones del puerto exterior de Caneliñas.
El avistamiento del cuerpo sin vida se produjo minutos antes, sobre las 13,20 horas, por integrantes de la tripulación del pesquero ‘Primero Victoria’, que comunicaron que habían localizado en esta zona un cadáver que vestía ropa negra y zapatillas blancas.
De inmediato se activó por parte de Salvamento Marítimo un dispositivo para recuperar este cuerpo sin vida, trasladando a la zona a la ‘Salvamar Betelgeuse’ que participaba en las tareas de búsqueda de un pescador desaparecido en la zona de costa de Covas, también en Ferrol.Una vez recuperado el cuerpo fue llevado al puerto de Oza.
Del caso, tras el traslado del cuerpo a la ciudad herculina, se hizo cargo el Cuerpo Nacional de Policía porque, según fuentes consultadas, se consideraba que correspondía con el denunciado en A Coruña.