(Jorge Martínez) Corren malos tiempos para el deporte, sacudido al igual que toda la sociedad por el covid-19. La dirección de la LGT sigue trabajando para un verano de remo en Galicia, pero lo que ya es seguro es que uno de los representantes de la comarca, A Cabana – Ferrol no participará en la Liga «A» del remo gallego.
Desde la dirección de A Cabana informan que tras haber consultado con sus entrenadores y sus deportistas, la renuncia a la participación este verano les ha parecido la medida más sensata, ya que lo principal es preservar la salud de todos y no ven suficiente los protocolos que se están manejando por parte de las autoridades competentes. En el documento de renuncia enviado en el día de ayer a la directiva de la LGT, argumentan también que algunos de sus deportistas tendrán que buscar trabajo este verano debido a la situación económica actual, así como también informan de las dificultades para obtener el permiso paterno en sus remeros en edad juvenil que participan con la tripulación senior. Por último, anuncian que no disponen de los medios técnicos ni sanitarios para asumir la organización de una regata.
Desde la dirección de A Cabana, lamentan tomar esta decisión sobre sus tripulaciones masculinas y femeninas, esperando que la LGT lo entienda y terminan deseando mucha suerte a todas las entidades que participen en la LGT 2020, siempre y cuando esta finalmente se dispute.
El Club de Remo de Ares a la espera de los test de la ACT
Donde también hubo mucho movimiento, rumorología y reuniones durante los últimos días fue en el entorno de la Liga ACT. Desde la dirección de la misma se informó de que a todos los participantes se le realizarán test serológicos. En el caso de Ares, estos se realizarán a finales de este mes de mayo en el Hospital Quirón de A Coruña. Su entrenador, Alberto Eclise, declaraba hace unos días su orgullo por el gran grupo humano que tiene entre sus manos. Unos remeros que llevan más de seis meses preparando la vuelta a la competición. Una liga ACT que a día de hoy está sumida en un mar de dudas, las cuales esperan disipar el próximo 30 de mayo en una Asamblea que se antoja vital para el futuro de la competición estrella del remo nacional.