El 92% de los negocios ferrolanos que solicitaron a Emafesa acogerse a la tarifa “sin actividad” se beneficiaron de esta medida decretada por el alcalde, Ángel Mato, el pasado 9 de abril como parte del plan del Concello para paliar los efectos económicos de la covid-19. En total, los establecimientos con pleno derecho a este cambio de tarifa son 823, que suman un ahorro de 122.764,87 euros en la factura del bimestre marzo-abril, lo que supone un promedio próximo a los 150 euros.
Esos 823 usuarios representan la cuarta parte de los abonados comerciales e industriales, a los que la Empresa Mixta de Aguas de Ferrol les gira cada dos meses el recibo, correspondiente al servicio que presta, a la recogida de la basura, al canon de la Xunta y al canon de Sogama. El cambio a la situación de “sin actividad” supuso la eliminación directa de estos dos últimos conceptos en el pagado de marzo-abril, mientras que el primero quedó reducido a una cantidad entre los 5,26 y los 5,88 euros, y el segundo, a un fijo de 22,40 (en total, de 27,66 a 28,28 euros).
En estos casos, la factura tampoco incluye los consumos de agua, ante la imposibilidad de realizar las lecturas de los contadores debido a la epidemia y entendiendo que para los negocios cerrados deben ser gastos prácticamente inexistentes, por lo que añadir un importe estimado sería siempre perjudicial para el usuario. En el caso de haber consumo, se compensaría en futuros recibos.
Aplazamiento de los retrasos de la tasa de depuración
La medida llevaba aparejada también la suspensión temporal del cobro de los retrasos de la tasa de depuración. En este caso, con carácter general para todos los usuarios, también los particulares, una decisión que se adoptó debido a las “excepcionales circunstancias” y para no agravar más la situación económica de la ciudadanía.
Durante el plazo establecido en el decreto de la alcaldía de 9 de abril , que finalizaba el último día de ese mes, Emafesa recibió 892 solicitudes. De ellas, se aprobaron las citadas 823, mientras que 51 procedían de negocios con actividades no contempladas en el Real Decreto 463/2020, de 14 de marzo, por lo que se declaró el estado de alarma, para su cierre. El resto, otras 18, se están analizando debido a cuestiones como falta de documentación, que existan pagos previos pendientes u otras circunstancias similares.
La posibilidad de acogerse a la tarifa “sin actividad” fue la segunda medida puesta en marcha por el Concello para favorecer la economía local. Antes, ya se había modificado el calendario del contribuyente para aplazar los pagos, e incluso bonificar algunos, como es el caso de la tasa de terrazas. Esta flexibilidad fiscal fue extendida de nuevo este mismo mes a causa de la prolongación del estado de alarma. Dentro de este paquete de iniciativas en favor del tejido empresarial ferrolano, el gobierno local promovió, con el acuerdo de todos los grupos políticos de la corporación municipal, el Plan de Mejora para la Empleabilidad, una serie de ayudas a autónomos y pequeñas empresas por valor de dos millones de euros que se están tramitando en estos momentos. Los miembros de estos colectivos afectados por la crisis de la covid-19 pueden solicitarlas hasta el próximo 5 de junio.
Una ayuda de la ciudad para sus emprendedores
El alcalde destacó, tras conocer los datos del número de negocios que se acogieron al cambio de tarifa, que todas las medidas de apoyo a autónomos y pequeñas empresas que está poniendo en marcha el Concello, con el acuerdo de toda la corporación, son, en realidad, “unas ayudas que toda la ciudad, todos los contribuyentes ferrolanos, con su esfuerzo, le prestan a su tejido económico”. “Los emprendedores que se benefician de ellas deben ser conscientes de que reciben el apoyo de toda la ciudadanía, no de una administración”, dijo Ángel Mato.